Más de 12,000 soldados rusos han muerto desde el inicio de la invasión de Ucrania, afirmó hoy el primer ministro ucraniano, Denys Shmyhal, en una comparecencia por vídeo ante la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa.

Además, las tropas rusas han perdido 389 carros de combate, 1,249 vehículos blindados de infantería, 77 aviones de combate y 90 helicópteros, añadió, para destacar la intensidad de la “guerra abierta” que sufre su país mientras Moscú insiste en hablar de una “operación militar especial”.

Shmyhal intervino en lugar del presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, quien estaba previsto, pero finalmente no pudo hacerlo, ante una sesión que hoy discute el conflicto y que mañana debatirá y votará una propuesta sobre las medidas que el Consejo de Europa debería tomar contra Rusia por su invasión de Ucrania.

El organismo ha suspendido de momento la participación rusa y el proyecto de resolución, que se presentará esta tarde, podría incluir la expulsión como una de las posibilidades, indicaron a EFE fuentes conocedoras del texto.

Shmyhal apostó claramente por la solución más drástica, al pedir “la expulsión de Rusia del Consejo de Europa”.

El primer ministro ucraniano agradeció a los países del este de Europa el apoyo y solidaridad que han mostrado en la acogida a más de 2.5 millones de refugiados que han huido de su país.

Shmyhal recalcó que la invasión supone “la violación de todos los derechos y libertades fundamentales” de Ucrania y su pueblo por parte de Rusia, y denunció la muerte de 90 niños en el bombardeo de ciudades, así como la destrucción de escuelas y hospitales.

También urgió a “unir esfuerzos, no solo para defender a Ucrania, sino para defender a toda Europa”, y por ello volvió a pedir “cerrar el cielo sobre Ucrania, por el bien de Europa y de la seguridad mundial”.