MEXICO. Un grupo de bomberos de la ciudad turística de Los Cabos, en el norte de México, tuvo que despojarse de su equipo de trabajo tras sofocar un incendio a petición de un empleado que quiso comprobar que no habían sustraído nada de una habitación quemada.

"Recibimos la llamada de emergencia y durante el transcurso de la contención del incendio a un empleado del hotel se le pidió que se retirara del humo y dejara trabajar. Él dijo que no se podía quitar porque tenía miedo que los bomberos se robaran las pertenencias", dijo el sargento Gabriel Tinoco de los bomberos de Cabo San Lucas en una entrevista con una emisora de radio local.

"Pidió que hasta en calzones se quedaran delante de la policía. Se nos hizo excesivo", agregó.

En un vídeo difundido por medios locales se observa cómo al menos siete bomberos que se encuentran frente a varias habitaciones de hotel y un letrero en el que se lee "The Mexican Inn" se despojan de sus abrigos ignífugos en actitud distendida y sonriendo.

Varios policías, que comparten sonrisas y filman la escena con sus celulares les acompañan. Varias personas hablan frente a la habitación del hotel sin prestarles demasiada atención y periodistas locales graban la escena.

Mayte Rivera, propietaria del hotel, justificó la acción a un noticiero local de la emisora Televisa. "En ningún momento hubo tal intención de acusar a los bomberos de robo. La persona quiso estar presente para salvaguardar las pertenencias de los huéspedes, que nos dijeron que tenían valores en el cuarto y preguntaron que si estaba seguro", dijo.

"El encargado sintió la desconfianza. Fue un malentendido", agregó Rivero.

"El gerente en su corazón y su mente no siente que haya cometido nada".

Cabo San Lucas es una conocida localidad turística ubicada en el extremo sur de la península de Baja California, al norte de México.