Scott Garside y Emma Newman estaban muy emocionados por su primera hija, pues esta pareja de Inglaterra esperaba con ansias al bebé que llenaría de alegría sus vidas. Charlotte nació el 19 de agosto de 2007 con una enfermedad que, en su momento, no tenía nombre.

Los doctores informaron a esta pareja que Charlotte Garside había nacido con una forma de enanismo primordial que era tan extraña que ni siquiera tenía un nombre médico.

La condición de esta bebé había impedido su crecimiento, generó anormalidades en su cerebro y problemas de alimentación. Por estas razones los médicos afirmaron que era la “bebé más pequeña del mundo” y que no viviría más allá de la edad de un año.

Cuando nació, Charlotte pesaba menos de 2 libras (1 kilo), medía 25 cm y sus padres tenían que vestirla con ropa de muñecas, ya que la ropa de bebé le quedaba muy grande.

“Hay muchas incógnitas, pero Charlotte tiene una manera de sorprenderte cuando menos lo esperas. No sabíamos si viviría tanto tiempo”, puntualizó Emma al Daily Mail.

Charlotte tiene un sistema inmunológico debilitado, quistes en el hígado, su desarrollo mental y físico se ha visto afectado a medida que pasan los años. Pese a esto, sus padres la describen como una niña muy fuerte y muy hábil.

“Cuando la gente la conoce por primera vez, tienen miedo de que se rompa si la tocan, pero ella es bastante luchadora y no se queda quieta ni un segundo”, dijo su madre al medio anteriormente citado.

Charlotte logró derribar los pronósticos médicos, y, en 2012, sus padres la inscribieron al colegio: “Es muy curiosa y en la escuela ya nos han dicho que tiene una edad de aprendizaje equivalente a la de un niño de tres años, lo cual es más alto de lo que pensábamos”.

Actualmente, la “niña más pequeña del mundo” mide menos de 70 cm, sus padres continúan comprándole ropa para recién nacidos y es admirada por sus seguidores en Facebook. El próximo 19 de agosto llegará a la edad de 17 años, siendo un ejemplo de superación.