La reina Isabel II de Inglaterra recordó hoy los "momentos de oscuridad" que ha afrontado el mundo durante 2015 en su tradicional discurso de Navidad, en el que empleó en general un tono positivo para subrayar que "la luz" siempre se impone.

En su mensaje anual emitido por televisión y radio, y escrito por ella misma, la reina habló de encontrar "esperanza" tras un año en el que el mundo se ha visto sacudido por atentados terroristas como los ocurridos recientemente en París y en Túnez.

Gran parte del discurso versó sobre el significado que para ella tiene la Navidad y de "los sentimientos de ánimo y buena voluntad" que evocan las luces de un árbol navideño, cuya popularidad durante estas fechas, dijo, se debe en parte a la reina Victoria y al príncipe Alberto, que contribuyeron a extender esa tradición en el siglo XIX.

"Reunirnos alrededor de un árbol nos da la ocasión de pensar sobre el año que viene", apuntó Isabel II, quien confesó que "tiene ganas" de que 2016 sea un año "lleno".

La Navidad "es una época para recordar todo aquello por lo que tenemos que estar agradecidos", dijo.

"Es cierto que el mundo ha tenido que enfrentarse a momentos de oscuridad este año, pero el Evangelio de San Juan contiene un versículo de gran esperanza, con frecuencia leído en los servicios de Villancicos de Navidad: 'La luz brilla en la oscuridad, y la oscuridad no ha superado eso", señaló.

La soberana británica indicó que "un motivo para el agradecimiento fue la conmemoración este verano de los 70 años desde el final de la II Guerra Mundial", al tiempo que dio las gracias a los veteranos que lucharon en el conflicto.

En su discurso aludió también a la figura de Jesucristo y recordó que "pese a haber sido desplazado y perseguido durante su corta vida, el mensaje invariable de Cristo no fue de venganza ni violencia sino, simplemente, de que deberíamos amarnos los unos a los otros".

La Reina recordó al nuevo miembro de su familia, la princesa Carlota, segunda hija de los duques de Cambridge, nacida el pasado 2 de mayo.

Para grabar el mensaje de Navidad, la monarca, de 89 años, se vistió con un traje en tonos blancos y plateados de la modista Angela Kelly, y apareció sentada en un escritorio de una habitación del siglo XVIII del Palacio de Buckingham, su residencia oficial, en la que se veía un gran árbol de Navidad de fondo.

En el escritorio se veían tres fotografías familiares, una de ellas tomada por el renombrado fotógrafo peruano Mario Testino, que muestra el bautizo de la princesa Carlota celebrado el pasado julio.

En esa instantánea se ve a la duquesa de Cambridge sosteniendo a la nueva nieta de Isabel II, mientras que el príncipe Guillermo hace lo mismo con su primogénito, el príncipe Jorge.

La segunda imagen del escritorio de la Reina es del príncipe de Gales y su esposa, la duquesa de Cornualles, el día de su boda, en abril de 2005, mientras que la tercera foto revela una imagen informal de la Reina y su marido, el duque de Edimburgo, ambos riendo.

El discurso navideño de la monarca está escrito por la propia Isabel II y es un reflejo de los asuntos de la actualidad mundial así como sus propias experiencias vividas el último año.