Imágenes aéreas publicadas por medios estatales chinos mostraban el domingo una amplia devastación en parte de la ciudad sureña de Guangzhou después de que un tornado golpease la zona el día anterior. Cinco personas murieron, decenas resultaron heridas y un centenar de edificios sufrieron daños.

Mientras negocios y vecinos empezaban a retirar los escombros, las imágenes mostraban las cuadras devastadas en las zonas más afectadas y pequeños grupos de edificios en pie en medio de la destrucción, con un camión volcado de lado y autos aplastados por los escombros. Algunos edificios habían perdido sus tejados de metal.

El tornado, que dejó la zona sin electricidad, también hirió a 33 personas el sábado, según las autoridades.

Guangzhou es la capital de la provincia de Guangdong y un núcleo manufacturero cerca de Hong Kong. El tornado se produjo durante una tormenta eléctrica vespertina con granizo que también causó daños en 141 edificios fabriles, según las autoridades.

Ninguna casa quedó destruida, señalaron, aunque un sitio web de noticias del Southern Media Group informó de ventanas rotas en varias viviendas.

El tornado golpeó varios poblados en el distrito Baiyun de Guangzhou. En uno de ellos se veían restos de materiales de construcción colgando de árboles y edificios, según el sitio de Southern Media. El meteoro golpeó el complejo de una fábrica de muebles, donde los trabajadores se cobijaron en una vivienda privada cuando la tormenta arrancó el tejado de metal de su edificio, según el sitio web.

Los trabajadores empacaban materiales que iban a desecharse el domingo.

El desastre se produjo una semana después de que aguaceros e inundaciones mataran al menos a cuatro personas en la provincia de Guangdong.

La secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, visitó Guangzhou durante una visita oficial a China este mes. La ciudad, antes conocida como Cantón, también acogió hace poco la Feria de Cantón, una importante muestra de exportación e importación que atrae a compradores de todo el mundo.

Dos tornados mataron en septiembre a 10 personas en la provincia de Jiangsu, en el este de China.