París. Francia considera que hay que dejar una oportunidad a las negociaciones para un acuerdo de paz en Ucrania ante las presiones de Estados Unidos y sobre todo insiste en que es Rusia la que bloquea todo y la que tiene que responder.

Esta es la primera reacción francesa a la advertencia del secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, que este viernes al irse de París ha señalado que su Gobierno se propone tomar una decisión “en los próximos días”, porque “Estados Unidos tiene otras prioridades”.

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Preguntado por esas palabras, el portavoz del Ministerio francés de Exteriores ha señalado en conferencia de prensa que Francia también está “en varios frentes”, aunque la de Ucrania sea “una crisis importante”.

En cualquier caso, ha subrayado que una de las conclusiones de las conversaciones que hubo el jueves en París entre europeos, ucranianos y estadounidenses es que “en primer lugar hay que dejar su oportunidad a las negociaciones en marcha”, porque “hay un interés común” en que prosperen y se resuelva la crisis.

El portavoz francés ha insistido en que si el presidente estadounidense, Donald Trump, ha manifestado “claramente” que quiere que termine la guerra, y también los ucranianos y los europeos, “ahora es la parte rusa la que tiene que responder”.

Porque -ha añadido- “ha habido propuestas de acuerdo del cese el fuego que Ucrania aceptó hace ahora un mes y todavía no hay respuesta rusa. De modo que la cuestión es saber si Rusia quiere comprometerse”.

El portavoz ha eludido la cuestión de si la advertencia de Rubio de abandonar la crisis ucraniana es una presión sobre todo para los ucranianos y para los europeos, más que para Rusia, y ha insistido en que la delegación estadounidense participó la víspera en unas discusiones que fueron “ricas” e “importantes”.

Además, recordó que los participantes en esos encuentros acordaron volver a reunirse en Londres a finales de la semana próxima en ese mismo formato con ucranianos, europeos y estadounidenses, que en París era la primera vez que se concretaba para abordar la guerra en Ucrania desde que Donald Trump está en la Casa Blanca.

Rubio estuvo junto al enviado especial de Trump, Steve Witkoff, que fue recibido por el presidente francés, Emmanuel Macron, primero en un almuerzo y más tarde en un encuentro en el que participó una misión enviada por Kiev, encabezada por el jefe de gabinete del presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, así como representantes del Reino Unido y Alemania.

Aunque ninguno de ellos ha hablado del fondo de esas conversaciones, el portavoz francés de Exteriores ha señalado que “una cuestión absolutamente clave” que se abordó son las garantías de seguridad que se ofrecerían a Ucrania en caso de un alto el fuego para que la paz fuera “duradera y justa”.

Al ser preguntado sobre si hay acuerdo, ha reconocido que “la discusión está abierta” y continúa, además de hacer hincapié en que no se limita a la cuestión controvertida del envío de tropas de países aliados a Ucrania.

Ha repetido que “la primera garantía” de seguridad es que Ucrania tenga un ejército “fuerte” y que “las tropas de reaseguro” de los aliados que se podrían desplegar en Ucrania -algo que Estados Unidos ya ha dicho que no hará- son uno de los diferentes elementos.

Por otro lado, el portavoz francés ha confirmado que el próximo 9 de mayo el jefe de la diplomacia francesa, Jean-Noël Barrot, irá a Kiev junto a sus homólogos de otros países europeos, en un gesto de apoyo a Ucrania, coincidiendo con el día de conmemoración por Rusia de su victoria en la Segunda Guerra Mundial frente a la Alemania nazi.