SOLINGEN, Alemania. El grupo Estado Islámico reclamó el sábado la responsabilidad por un ataque con cuchillo en Solingen, Alemania, en que murieron tres personas y ocho más resultaron heridas, de acuerdo con su sitio de noticias Amaq.

El grupo indicó que los objetivos del atacante eran los cristianos y que es “un soldado del Estado Islámico” quien realizó el ataque “para vengar a los musulmanes en Palestina y en todas partes”.

La policía comenzó a catear una vivienda para solicitantes de asilo en el centro de la ciudad de Solingen, incluso con fuerzas especiales, reportó la agencia noticiosa alemana DPA.

“Hemos recibido soplos y, por ello, actualmente realizamos actividades policiales”, dijo un vocero de la policía.

Relacionadas

Unidades especiales de la policía se unieron a la búsqueda del atacante no identificado que degolló a varios asistentes de un concurrido festival en la ciudad del oeste de Alemania, matando a tres personas e hiriendo al menos a otras ocho, cuatro de ellas de gravedad.

Un joven de 15 años fue arrestado la madrugada del sábado. La policía señaló que es sospechoso de saber sobre el ataque planeado y no informar a las autoridades, pero aclaró que él no era el atacante.

Markus Caspers, de la sección antiterrorista de la fiscalía, informó el sábado en una conferencia de prensa que las autoridades no han encontrado al autor del ataque.

“Hasta ahora, no hemos podido identificar un motivo, pero considerando las circunstancias generales, no podemos descartar” la posibilidad de terrorismo, afirmó Caspers, aunque no ofreció más detalles.

Las tres personas fallecidas fueron dos hombres de 67 y 56 años, y una mujer también de 56 años, de acuerdo con las autoridades. La policía indicó que el agresor parecía haber atacado deliberadamente a sus víctimas por la garganta.

Thorsten Fleiss, de la policía alemana, que era el jefe de operaciones el viernes por la noche, dijo que la policía realiza varias búsquedas e investigaciones en todo el estado federado de Renania del Norte-Westfalia, que continuarán a lo largo del día.

Indicó que es un “enorme desafío” reunir las pruebas disponibles y los testimonios de los testigos para obtener un panorama general de lo ocurrido.

Fleiss también dijo que la policía había hallado varios cuchillos, pero añadió que no podía confirmar si alguno de ellos había sido usado como arma por el perpetrador durante el ataque.

La policía advirtió a la población que permanezca alerta, incluso cuando algunos comenzaron a depositar flores en el lugar. Las autoridades establecieron un portal en línea donde los testigos pueden subir imágenes y cualquier otra información relevante sobre el ataque.

Varias iglesias en Solingen abrieron sus puertas para ofrecer un espacio de oración y atención pastoral de emergencia.

La ministra del Interior, Nancy Faeser, que visitó Solingen la tarde del sábado, subrayó que el gobierno hará todo lo posible para apoyar a la ciudad y a sus habitantes.

“No permitiremos que un ataque tan atroz divida a nuestra sociedad”, dijo, presentándose junto al ministro presidente del estado alemán de Renania del Norte-Westfalia, Hendrik Wüst, y el ministro estatal de Asuntos Internos, Herbert Reul.

Wüst describió el ataque como “un acto terrorista contra la seguridad y la libertad de este país”. Pero Faeser, el funcionario de seguridad de más alto rango del país, no lo ha clasificado como un “ataque terrorista”.

Reul anunció que la visita planeada del ministro del Interior a la escena del crimen no se realizaría debido a la operación policial en curso en las áreas afectadas de la ciudad. Prometió al público “dar tiempo a la policía” para que pueda hacer su trabajo. También dijo que la presencia policial aumentaría en los eventos de gran magnitud, especialmente debido a que el perpetrador no ha sido capturado.