Tras la confirmación de que los tres cuerpos encontrados en un pozo en la zona de La Bocana, en el estado de Baja California, México, son de los surfistas extranjeros desaparecidos y asesinados a balazos en un intento de robo el mes pasado, la novia de Callum Robinson, uno de ellos, publicó una serie de fotos y un emotivo mensaje de despedida a su pareja en sus redes sociales.

“Mi corazón está roto en un millón de pedazos. No tengo las palabras en este momento”, escribió Emily Horwath en una historia de su cuenta de Instagram junto a una foto acompañada de Callum, el joven de 33 años asesinado el pasado 27 de abril. Las otras dos víctimas fueron su hermano Jake, de 30 años, y un amigo de ambos, Jack Carter Rhoad, de 30, de nacionalidad estadounidense. Los cuerpos de los tres fueron arrojados al fondo de un pozo de 15 metros cerca del lugar donde desaparecieron.

Horwath compartió una serie de imágenes junto a su pareja surfista. En algunas, se los ve vestidos de gala y abrazados, en otras besándose o bailando juntos. “Sos único. Te amaré por siempre”, escribió la mujer. “Siempre jugando”, puso en otra historia, junto a una foto de Callum colgado de un árbol. “Daría cualquier cosa por un abrazo más de koala”, apuntó junto a una imagen de los dos en la que se daban un abrazo.

En otras publicaciones, se lo ve al Callum bailar en la calle, posar en la playa o durante un almuerzo, hacerse la manicura de los pies, realizar desafíos divertidos o caras graciosas en el auto junto a su novia. “Eso es exactamente lo que eras: positividad y sonrisas”, recordó Emily.

La chica, residente de San Diego, puso en marcha una recaudación de GoFundMe como soporte para la familia de los dos hermanos, que para este lunes por la mañana ya había recaudado más de $190.000. “A raíz de la desgarradora pérdida de Callum Robinson y Jake Robinson, nuestros corazones sufren de dolor por sus familias, amigos y comunidad. Su presencia trajo alegría, amor y bondad inconmensurables a quienes los rodeaban, dejando una huella en nuestras vidas”, dice la publicación.

Qué se sabe sobre los tres surfistas asesinados en México

Carter Rhoad y los hermanos Robinson desaparecieron el pasado 27 de abril mientras estaban de viaje en el municipio de Ensenada, aproximadamente a una hora y media al sur de la frontera entre Estados Unidos y México. Según contó la madre de los hermanos en aquel momento, la alarma en la familia se disparó cuando los tres surfistas nunca volvieron a su alojamiento.

El pasado sábado 4 de mayo, después de varios días de intensa búsqueda, las autoridades mexicanas hallaron tres cadáveres en un pozo de 15 metros de profundidad cerca de la zona donde habían desaparecido. Este lunes, en tanto, se confirmó que los tres cuerpos pertenecen a los surfistas. “La fiscalía confirma que los cuerpos hallados en el pozo en la zona conocida como La Bocana, al sur de Ensenada, corresponden a los de nombre Jake y Callum, de origen australiano, así como el estadounidense Carter”, detalló un comunicado la fiscalía de Baja California.

A su vez, los médicos forenses y los familiares ratificaron que la muerte de los turistas fue producto de un balazo. Según reconstruyó la fiscal estatal María Elena Andrade, el móvil del crimen habría sido el robo de la camioneta en la que viajaban los jóvenes. La mujer consideró que presumiblemente los turistas extranjeros fueron interceptados por presuntos criminales para apoderarse de su vehículo, que posteriormente fue hallado incendiado.

“Los agresores sacan un arma que tenían en su poder y privan de la vida al que de inicio se opuso al robo y posteriormente se les echan encima a los otros dos (...) y también los privan de la vida”, planteó Andrade. “Todos presentan un orificio producido por proyectil de arma de fuego en la cabeza”, añadió.

El viernes la fiscalía ya había detenido a un hombre señalado de “desaparición cometida por particulares”, Jesús Gerardo “N”, alias “El Kekas”, que posee antecedentes relacionados con violencia, venta de drogas y robo. Además, capturaron a otras dos personas, incluida una mujer, investigadas por su probable participación en el mismo crimen y por la portación de metanfetaminas.