Las investigaciones por el asesinato de Jovenel Möise, presidente de Haití, parecen que comienzan a avanzar. Desde el 7 de julio del 2021, día del magnicidio, 18 colombianos -la mayoría con sus camisas negras polvorientas- aparecieron en las primeras páginas de todo el mundo acusados del brutal crimen.

Ahora, informó The New York Times, el capitán retirado Germán Rivera, de 45 años, quien es señalado como el líder del complot para asesinar a Moïse, se declararía culpable de cuatro cargos de conspiración para secuestrar y matar al presidente de Haití.

Rivera fue extraditado de Haití a Estados Unidos en febrero del 2023.

De acuerdo con el diario estadounidense, este mismo jueves se realizaría la audiencia contra Rivera. “Le escribo para informarle que el Sr. Germán Rivera está programado para declararse culpable”, dijo Sarah Schall, portavoz de la oficina del fiscal federal en el distrito sur de Florida.

Para la justicia de ese país, esta es una clara señal de que Rivera está dispuesto a cooperar con los fiscales y testificar contra los otros acusados.

Las investigaciones adelantadas señalan a Rivera como la persona que reclutó a unos 20 contratistas de seguridad privados, quienes posteriormente serían acusados de asesinar a sangre fría a Moïse en su domicilio.

Desde el crimen, el grupo de colombianos se ha mantenido en difíciles condiciones en una prisión de Puerto Príncipe, a la espera de que avance el proceso judicial; sin embargo, las condiciones de seguridad y políticas de ese país han generado obstáculos para los casos.

Familiares han denunciado a través de videos las difíciles circunstancias en las cuales viven los exmilitares colombianos. Justamente, los allegados a Rivera suplicaban por mejores condiciones para los mercenarios.

Los procesos que sí están adelantados son los que tiene la Corte para el Distrito Sur de Florida, Estados Unidos, donde ha avanzado el proceso judicial contra siete personas, dos de las cuales son colombianas. Justamente, en febrero de este año, fue presentado ante la jueza Alicia Otazo-Reyes el capitán retirado del ejército, Germán Alejandro Rivera tras ser extraditado.

Rivera, un destacado exmilitar, fue quien recibió el contacto por parte de la empresa CTU Security, con sede en Miami, para que un grupo de colombianos viajara a Haití a prestar seguridad a personas poderosas de ese país.

La familia de Rivera le dijo a EL TIEMPO en su momento que el exmilitar conocía a integrantes de esa compañía desde hace unos 10 años, pues en su actividad en el Ejército se los cruzó en ejercicios de entrenamiento.

De hecho, está claro que Rivera fue quien se encargó de reclutar al grupo de colombianos que hoy está preso en Haití.

Sobre el proceso contra Rivera, The New York Times explicó que inicialmente se declaró inocente después de su extradición de Haití en febrero. Este medio también informó que podría enfrentar cadena perpetua.

En el magnicidio de Moïse, el presidente recibió 12 disparos a corta distancia y murió instantáneamente. Los exsoldados colombianos fueron reclutados en mayo de 2021 para viajar a Haití como contratistas militares privados para brindar seguridad a un posible candidato presidencial, Christian Sanon, un pastor haitiano-estadounidense y quien también es señalado como uno de los cerebros del magnicidio.

Posteriormente, el plan evolucionó hasta arrestar a Moïse y asesinarlo. No obstante, Rivera podría solicitar una sentencia reducida a cambio de su cooperación, aunque el beneficio que podría recibir dependería del juez.

La decisión de Rivera de declararse culpable, para muchos enterados en el caso, es sorpresiva. Su familia había mantenido la versión de que el grupo de colombianos es inocente y que no tenían que ver en el crimen.

Otros involucrados en magnicidio del Presidente de Haití

Hace apenas dos meses, en junio del 2023, se conoció que Rodolphe Jaar, de 51 años, fue condenado a cadena perpetua en Estados Unidos por el homicidio del presidente de Haití, Jovenel Moïse, en julio de 2021.

La sentencia la impartió un juez de Miami, al considerar que Jaar “conspiró junto a un grupo de mercenarios para asesinar a Möise a cambio de dadivas económicas”.

Por otro lado, EL TIEMPO ha consultado al equipo jurídico de Quintero López Abogados, representante en Colombia de algunos de los familiares de los capturados en Haití. “Se encuentran en la línea estratégica de verificar cómo dichos empresarios pueden salvaguardar la presunción de inocencia de los colombianos”, señalaron.

De hecho, Rivera sería el primer colombiano en aceptar su responsabilidad, teniendo en cuenta que los colombianos presos en Haití se mantienen en su inocencia.

También se espera la decisión en el caso de Mario Antonio Palacios Palacios, quien también está en poder de las autoridades de Estados Unidos.

Por el caso fueron arrestados el venezolano-estadounidense Antonio Intriago, dueño de la empresa de seguridad CTU Security, investigada por posibles vínculos con el asesinato de Moïse; el colombo-estadounidense Arcángel Pretel Ortiz, socio de Intriago; además de los haitianos-estadounidenses James Solages, de 37 años, Joseph Vincent, de 57, y Christian Sanon, de 54.