Un bebé prematuro encontrado en una habitación de hotel de Ámsterdam después de ser secuestrado por sus padres de una sala de maternidad en Francia se encuentra bien, dijo el sábado un fiscal en Bélgica.

El padre del bebé, de 23 años, y su madre, de 25, fueron arrestados, dijo el fiscal Vincent Macq en conferencia de prensa.

La policía los encontró junto con la abuela del bebé y otros dos niños de 3 y 10 años.

“Trabajamos como locos durante tres días, estamos de rodillas pero estamos felices, orgullosos y encantados”, agregó el funcionario.

La búsqueda de Santiago, de 17 días de nacido, comenzó el 22 de octubre, cuando desapareció de un hospital de París. Sus padres fueron identificados de inmediato como los principales sospechosos.

La policía francesa emitió una alerta con llamamientos de información transmitidos por radio, televisión y en internet advirtiendo que la vida del bebé prematuro estaba en peligro, ya que necesitaba atención médica constante.

La investigación se trasladó entonces a Bélgica, donde la policía encontró un coche que se cree que pertenecía a los padres. En el vehículo había una tarjeta SIM y el número de serie de un teléfono, lo que finalmente les permitió rastrear el paradero de la pareja. Al parecer, habían cruzado la frontera hacia Holanda.

La saga terminó el viernes por la noche, cuando la policía holandesa pudo identificar la habitación de hotel donde se alojaba la familia.

“El arresto ocurrió sin ningún obstáculo”, dijo Macq, y agregó que la vida del bebé no corría peligro. “La abuela está cuidando a los otros dos niños”.