Sídney. Australia confirmó este martes el primer caso de una nueva variante más contagiosa del COVID-19, que fue descubierta la semana pasada en Sudáfrica, en una persona que permanece en un centro de cuarentena tras regresar al país desde el extranjero.

“Este es el primer caso positivo de la variante de Sudáfrica en Australia”, dijo la responsable de Salud del estado australiano de Queensland, Yvette D’Ath, en un comunicado.

Se trata de una mujer que llegó a Brisbane, procedente de Sudáfrica, el 22 de diciembre y que fue trasladada del centro de cuarentena en el que estaba alojada a un hospital de Queensland, por lo que las autoridades sanitarias consideran que el caso no supone un riesgo de contagio local.

Este caso de la variante “501.V2” se suma a al menos cinco casos detectados en centros de cuarentena de Australia de infecciones de la nueva variante “B117” detectada en Reino Unido, que también es altamente contagioso.

Australia, que mantiene sus fronteras cerradas desde marzo pasado con algunas excepciones, intenta repatriar a unos 30,000 residentes y ciudadanos de este país que se encuentran varados en el exterior, en medio de la alerta mundial por estas nuevas variantes del coronavirus.

Actualmente, las autoridades de salud luchan contra un brote de COVID-19 en Sídney, que acumula unos 130 casos desde que estalló a mediados de mes y ha obligado a confinar a unos 250,000 habitantes del distrito Playas del Norte.

El país acumula más de 28,340 casos de COVID-19 desde el inicio de la pandemia, incluyendo 909 fallecidos, la mayoría de los cuales se produjeron durante el rebrote entre junio y noviembre en Melbourne y que fue vinculado a fallos en los centros de cuarentena de viajeros procedentes del exterior.