Sobre 90 personas fueron arrestadas y 13 niños australianos durante una operación internacional realizada por el Negociado Federal de Investigaciones (FBI) y la Policía Federal Australiana (AFP) rescatados, contra una sofisticada red de abuso infantil y pedofilia en línea, informó la Policía Federal Australiana en su portal.

La operación se originó luego que dos agentes del FBI fueran asesinados en el 2021, cuando intentaban diligenciar una orden de allanamiento en un apartamento en la Florida, en el que se cree operaban elementos asociados a esta organización.

La operación comenzó formalmente en el 2022, cuando el FBI contacto al Centro Australiano de Lucha contra la Explotación Infantil (ACCCE) de la AFP, con información sobre miembros australianos de la organización, que utilizaban el “dark web” para sus operaciones.

La mayoría de los presuntos delincuentes australianos, algunos de los cuales también están acusados de haber producido su propio material de abusos a menores para compartirlo con otros miembros de la red, trabajaban en ocupaciones que requerían un alto grado de conocimientos tecnológico.

Los miembros utilizaban programas informáticos para compartir archivos de forma anónima, chatear en tablones de anuncios y acceder a sitios web de la red.

Los miembros de la red podían buscar y distribuir imágenes y vídeos de material de abuso de menores y, al parecer, utilizaban el cifrado y otros métodos para evitar ser detectados por las fuerzas del orden.

El ACCCE, dirigido por la AFP, coordinó la operación Bakis en Australia y colaboró con la policía del Territorio de la Capital Australiana, la policía de Nueva Gales del Sur, la policía de Queensland, la policía de Australia Meridional, la policía de Tasmania y la policía de Australia Occidental.

Los presuntos delincuentes australianos tenían entre 32 y 81 años.

Se alega que algunos de los menores retirados habían sido víctimas directas de abusos, mientras que a otros se les retiró como medida de seguridad.

Un funcionario público y un operador de un centro de llamadas de la Costa Central de Nueva Gales del Sur, figuran entre los individuos detenidos y acusados a lo largo de la operación.

Mientras que en Estados Unidos, el FBI intervino con 79 personas por su presunta implicación en la red.

Los agentes del FBI Daniel Alfin y Laura Schwartzenberger fueron asesinados a tiros por un delincuente cuando ejecutaban una orden de registro en el marco de una investigación relacionada. Tras su asesinato, el FBI inició la operación internacional contra los delincuentes de la plataforma.

Helen Schneider, Comandante de la AFP, declaró que evitar que los niños sufran daños y llevar a los presuntos delincuentes ante los tribunales es siempre una prioridad para las fuerzas del orden.

“El éxito de la operación Bakis sólo ha sido posible gracias a la estrecha relación de trabajo entre el ACCCE, dirigido por las AFP, y el FBI, y a la dedicación de nuestro personal, que nunca ceja en su empeño de identificar a los niños que son víctimas de agresiones sexuales o que viven con alguien que comparte material sobre abusos a menores.

“Los delincuentes que utilizan la encriptación y la web oscura son un reto para las fuerzas del orden, pero la operación Bakis demuestra que cuando trabajamos juntos podemos llevar a los presuntos delincuentes ante los tribunales”, declaró el Comandante Schneider.

El visionado, la distribución o la producción de material de pornografía infantil es un delito atroz, y las medidas adoptadas por estos presuntos delincuentes para evitar ser descubiertos los hace especialmente peligrosos: cuanto más tiempo eviten ser descubiertos, más tiempo podrán perpetuar el ciclo de abusos”.

“El éxito de la operación Bakis demuestra la importancia de las asociaciones para la aplicación de la ley, a escala nacional aquí en Australia, pero también a escala internacional”.

Por su parte, Nitiana Mann, agente del FBI destaca en la AFP declaró: “Estamos orgullosos de nuestra larga relación con la Policía Federal Australiana que ha dado como resultado que 19 hombres australianos se enfrenten a un proceso penal como resultado de nuestra investigación colaborativa.”

“La complejidad y el anonimato de estas plataformas significan que ningún organismo o país puede luchar solo contra estas amenazas.

“Mientras sigamos tendiendo puentes mediante la colaboración y el trabajo en equipo, podremos garantizar que los buenos ganen y los malos pierdan”.

No se informó si la organización fue desmantelada en su totalidad o si la pesquisa continúa.