Leópolis. El Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) está detrás de la explosión en el puente de Crimea que ocurrió esta madrugada, según una fuente de dicho organismo citada por el diario digital ucraniano Ukrainska Pravda.

Por su parte, Rusia indicó que al menos tres personas han fallecido en la explosión.

“Según datos preliminares, tres personas fallecieron a causa del incidente. Estos son, presumiblemente, los pasajeros de un automóvil que estaba al lado del camión que explotó”, escribió esta agencia en su canal de Telegram.

El periódico Ukrainska Pravda reconoció que el propio servicio secreto no se ha pronunciado oficialmente sobre su participación en estos hechos.

La agencia de noticias Ukrinform cita un post del SBU en Telegram para admitir, junto informaciones que les han proporcionado fuentes de los servicios de seguridad, la participación de los servicios de seguridad ucranianos en la explosión e incendio del puente.

“El puente arde maravillosamente al amanecer. Un ruiseñor se encuentra con la SBU en Crimea”, dice el post del SBU, citado por Ukrainska Pravda, que parafrasea al poeta ucraniano Taras Shevchenko.

Ucrania celebró hoy los daños producidos en una parte del puente de Crimea por un incendio de un tanque de combustible esta madrugada, según declaraciones recogidas por la agencia de noticias ucraniana Ukrinform.

Las fuerzas aéreas de Ucrania informaron hoy en su cuenta de Telegram de la “destrucción” del puente: “Esta mañana en el puente de Crimea. Los tanques de combustible están en llamas. ¡Parte de la calzada también fue destruida! ¡Todo será Ucrania!”, dice el mensaje de las fuerzas aérea de Ucrania, que acompañan con imágenes del puente destruido.

Mijailo Podolyak, asesor del presidente ucraniano, Volodomir Zelenski, afirmó: “Crimea, el puente, el comienzo. Todo lo ilegal debe ser destruido, todo lo robado debe ser devuelto a Ucrania, todo lo ocupado por Rusia debe ser expulsado.

El Ministerio ucraniano de Defensa, a través de un tuit, afirmó que el puente de Kerch, uno de los símbolos del poder ruso en Crimea, ha caído.

La explosión del puente de Crimea, considerado el más largo de Europa, vuelve a poner en los titulares una obra de ingeniería clave para el tráfico ferroviario y automovilístico para Rusia.

Fue inaugurado en 2019 por el líder ruso, Vladímir Putin, cinco años después de anexionarse Crimea y es clave para no dejar aislada a esta península del resto de Rusia.

Mientras Ucrania celebra los daños, el Comité de Investigación de Rusia ha abierto un caso penal por un supuesto “delito”.

Pero, ¿cuándo se construyó el puente de Crimea sobre el estrecho de Kerch y que polémicas le han rodeado hasta ser dañado en plena invasión de Rusia a Ucrania?

Rusia se anexionó Crimea en 2014 (después de un referéndum en la península no reconocido por Ucrania ni la comunidad internacional y una intervención militar incruenta) y la única forma de unir ambas zonas sin pasar por territorio ucraniano era a través de un puente por el estrecho de Kerch.

Empezó a construirse en febrero de 2016 y tuvo un coste total de 228.000 millones de rublos (3.000 millones de euros). Mide 19 kilómetros de longitud y se le considera el más largo de Europa.

El puente, realizado con ingeniería rusa, incluye cuatro carriles para vehículos -dos en cada dirección- y dos vías de tren -una en cada dirección-.

Putin ordenó la construcción del puente, un proyecto originalmente ruso-ucraniano, con el fin de romper el aislamiento de la península ucraniana anexionada en marzo de 2014 con el resto del continente.

El estrecho de Kerch tiene entre 4,5 y 15 kilómetros de ancho y une los mares Negro y Azov.

El 15 de mayo de 2018, el presidente ruso inauguró el puente subido en un camión.

Al día siguiente comienzan a circular los primeros usuarios, que en los siguientes meses se quejarían de las colas kilométricas que se formaban a la entrada de la infraestructura.

Y el 23 de diciembre de 2019 otra vez Putin es el encargado de inaugurar, a bordo de un tren, la vía férrea que une Rusia con la anexionada península de Crimea. La velocidad prevista en el trayecto era de 120 kilómetros por hora.

“Va bastante más suave que el automóvil”, comentó Putin al maquinista de la locomotora del tren. El líder ruso se subió al tren en la ciudad de Kerch y se bajó en Tamán (región de Krasnodar), ya en territorio continental.

Putin ese día también calificó de “grandioso” el proyecto. “Este es un acontecimiento muy importante para Crimea, Sebastopol y todo el sur de Rusia, y también para todo nuestro país”, comentó.

Se estimaba entonces que cerca de 14 millones de personas cruzarían el puente al año.

Además, con el tren de larga distancia “Tavria” -antiguo nombre de Crimea- enlaza de manera permanente San Petersburgo y Sebastópol.

El 23 de diciembre de 2019 partió el primer tren. El alto representante de la Unión Europea para la Política Exterior, Josep Borrell, afirmó entonces que el tramo de ferrocarril que une a Rusia con la anexionada península de Crimea constituye “otra violación de la soberanía e integridad territorial” de Ucrania por parte de Moscú.

Y advirtió de la circunstancia de que el puente que sostiene el enlace ferroviario “limita el paso de barcos” a través del estrecho de Kerch hacia puertos ucranianos en el mar de Azov.

Todo lo que rodea la construcción del puente ha sido condenado tanto por Ucrania como por Occidente, que consideran a la península parte del territorio ucraniano.