Saná, Yemen. Al menos 30 militares murieron en un ataque con misiles y un dron cargado de explosivos contra una base militar en en el sur de Yemen, según un portavoz militar.

La cifra de heridos era de al menos 65 personas, dijo a The Associated Press Mohamed al-Naqeeb, vocero de las fuerzas sureñas de Yemen.

Hasta el momento nadie se ha responsabilizado del atentado.

La base aérea Al-Anad se vio golpeada por al menos tres explosiones en la provincia sureña de Lahj, que controla el gobierno yemení con reconocimiento internacional, según indicaron antes fuentes médicas y de seguridad.

Yemen lleva inmersa en una guerra civil desde 2014, cuando los rebeldes hutíes tomaron buena parte del norte del país y la capital, Saná, y forzaron al exilio al gobierno con reconocimiento internacional. Una coalición liderada por Arabia Saudí intervino en la guerra al año siguiente para apoyar al gobierno.

Un misil balístico cayó en la zona de instrucción de la base, donde docenas de soldados hacían ejercicios matinales, según las fuentes.

Los médicos describieron una escena caótica en la base tras las explosiones, en la que los soldados ponían a salvo a sus compañeros heridos por temor a otro ataque.

Los funcionarios culparon a los hutíes de los ataques en la base. Hablaron bajo condición de anonimato porque no estaban autorizados para informar a los medios.

El vocero militar de los hutíes no confirmó ni negó que hubieran participado en el ataque, similar a otras operaciones de los rebeldes con apoyo iraní. Los hutíes han hecho ataques parecidos, incluido uno con un dron bomba sobre la base de Al-Anad que mató a seis soldados en enero de 2019.