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El secretario del Departamento de Hacienda (DH), Juan Zaragoza, rechazó este martes el paquete de medidas presentado en la Cámara de Representantes para impulsar una nueva reforma contributiva, e insistió en la transición hacia el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) a partir del 1 de junio.
Zaragoza argumentó que ninguna de las propuestas legislativas, según presentadas por el representante Rafael Hernández Montañez, generaría los recaudos suficientes para poder honrarle a la ciudadanía algún alivio por concepto de las contribuciones sobre ingresos.
“En esencia, todos estos proyectos persiguen lo mismo y es dar unos alivios contributivos financiados por diferentes mecanismos, uno por un impuesto a los rendimientos de capital, otro por subir el IVU (Impuesto sobre las Ventas y Uso), otro por establecer un arbitrio… Matemáticamente, ninguno da”, manifestó el secretario en un aparte con periodistas.
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“Los ahorros contributivos, según propuestos, cuestan alrededor de $1,000 millones, y los mecanismos de financiamiento propuestos, ninguno llega a esa cantidad”, aseveró minutos antes de comenzar su exposición durante la primera vista pública de la Comisión cameral de Hacienda sobre los cuatro proyectos de reforma contributiva.
Zaragoza reconoció que el sistema establecido por la Ley 72-2015, que ordenó cambiar del IVU al IVA, resultó “incompleto”, pues provocó un aumento en la tasa del impuesto al consumo sin brindar ninguno de los alivios contributivos incluidos en la propuesta de reforma contributiva presentada por el Ejecutivo hace un año.
No obstante, el titular del DH afirmó que frenar la implantación del IVA en estos momentos podría agravar el panorama socioeconómico de la Isla.
“En estos tiempos de crisis, evitar la implantación de un mecanismo que ayude a reducir la evasión resulta sumamente incongruente. Detener el IVA pondría en riesgo la prestación de servicios esenciales en el Estado Libre Asociado, así como el pago de las obligaciones del Estado. Además, detener el IVA en este punto provocará un clima de incertidumbre e inestabilidad a nivel socioeconómico. Puerto Rico necesita un sistema contributivo eficiente y estable”, subrayó Zaragoza.