El presidente de República Dominicana, Danilo Medina, y el gobernador Alejandro García Padilla, acompañados de sus respectivas esposas, Cándida Montilla y Wilma Pastrana, arribaron esta mañana a Fortaleza, donde fueron recibidos por empleados de la mansión ejecutiva que portaban banderas puertorriqueñas y dominicanas, y por las monjas del convento Siervas de María.

La comitiva entró a La Fortaleza cerca de las 9:40 a.m. y, tras recibir los visitantes una breve descripción de lo que es el Palacio de Santa Catalina de parte del gobernador, caminaron por una alfombra roja hasta el portón donde les esperaban las monjas.

El saludo, se informó, respondió al hecho de que en el convento hay varias monjas de origen dominicano que expresaron su deseo de saludar al presidente.

El encuentro fue breve, pero ambos mandatarios y las primeras damas saludaron a cada una de las religiosas e intercambiaron besos y abrazos con estas, además de breves expresiones.

Poco después, las dos parejas aparecieron por el balcón de La Fortaleza desde donde dijeron adiós a empleados y al público que se reunió frente a los portones para ver a los ejecutivos.

En todo momento, un helicóptero de las Fuerzas Unidas de Rápida Acción (FURA) sobrevoló el área como parte de las medidas de seguridad.

Los dos mandatarios sostendrán una reunión privada durante la mañana y luego compartirán un almuerzo antes de moverse hacia el edificio Mercantil en Hato Rey, donde colocarán ofrendas florales en los bustos de varios próceres allí ubicados.

Posteriormente, se dirigirán hacia el Centro de Convenciones para la firma de los acuerdos entre los dos países.