El presidente de la Cámara de Representantes, Rafael “Tatito” Hernández, expresó esta mañana, camino a una reunión que tendría con el gobernador Pedro Pierluisi y el presidente del Senado, José Luis Dalmau, que prefiere que el inicio de clases comience en agosto, y no en marzo como ha propuesto la administración.

“Nuestra posición es consistente. Creo que el Departamento (de Educación), y esto no es una posición estrictamente mía personal sino de toda la Cámara de Representantes, no está listo, no han podido esbozar un plan claro, consistente. Creo que es un tema de salud, un tema de seguridad, un tema de las vidas de nuestros hijos, de nuestros maestros, de nuestros familiares que se pueden contagiar. Así que yo creo que lo idóneo y la prudencia es esperar”, sostuvo Hernández.

Agregó que “creo que no es lo correcto. Lo correcto es esperar a agosto, lo correcto es estar claro qué es lo que va a pasar en el sur de Puerto Rico, estar claro cuál es la infraestructura que hay disponible, cuándo terminan de vacunar a los empleados del Departamento. La prisa es mal consejera”.

Agregó que la reapertura de escuelas podría comenzar, “caso a caso”, como propuso el secretario del Departamento de Salud, doctor Carlos Mellado.

“Esto es caso a caso. Hay zonas, hay pueblos o hay sectores donde el porciento de positividad está por debajo del 5%. ¡Pues vamos a abrir esas!”, insistió. “Pero nadie me ha dado esa contestación de parte del Departamento de Educación, donde puedes hacer un planteamiento lógico, claro”.

Por otro lado, Hernández expresó que le dejarían saber al gobernador que darían paso en la Cámara a cuatro medidas que sometió el gobernador.

“Le voy a pedir al país que no las critique. Sencillamente que levante su voz, cuáles son las preocupaciones y las vamos a atender. No sencillamente vamos a estar en contra, porque hay que cumplir la palabra con el gobernador de atenderle las medidas y si hay que hacerle ajustes y si terminan con voto o no voto eso se dará en el proceso”, comentó. “Pero lo responsable es cumplir nuestra palabra de darle paso, no ser un obstáculo en el proceso y desarrollo económico del país, y, obviamente, mejorarla si hay que mejorarla, o si sencillamente tiene el apoyo de todos los legisladores entonces aprobarlas”.