Solo una de las 36 personas que han fallecido en Puerto Rico a causa de influenza durante la temporada 2023-24 que inició apenas en julio, tenía la vacuna para mitigar los riesgos de una enfermedad moderada a severa, un dato que resulta puntual para establecer la importancia de la inoculación en momentos en que los contagios están desenfrenados y afectando mortalmente y de manera exponencial a personas mayores de 60 años.

Así lo determinó en entrevista con Primera Hora la Primera Oficial Médico del Departamento de Salud, Iris Cardona, al describir como “claves” en la lucha contra la influenza la vacunación, las medidas de protección universal (lavado de manos, distanciamiento, uso de mascarillas, entre otros) y el acceso temprano a tratamientos de antivirales.

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Son complicaciones o muertes que se pueden evitar. El detalle está ahí (en la vacunación)”, sostuvo Cardona, al reaccionar al hecho de que solo una persona de las 36 que han fallecido de influenza en los pasados cuatro meses estaba vacunada, según confirmó la agencia.

El último reporte de la Oficina de Epidemiología e Investigación señaló, además, que el 84% (30) de las 36 defunciones ocurrió en personas de 60 años en adelante. De estas, 18 se registraron en el grupo demográfico de 80 años o más, 10 entre gente de 70 a 79 años y dos entre los grupos de 60 a 69 años.

En el total de muertes acumuladas se identificaron 19 féminas y 17 varones. Cabe señalar que el 40% de las 36 muertes se reportaron en las últimas cuatro semanas.

“Los que más se infectan son los pacientes pediátricos porque vemos que alrededor del 52.76% de los casos reportados en esta temporada son del grupo de 0 a 19 años, pero los que más se afectan son los de mayor edad, como se ve reflejado en las muertes”, subrayó la también infectóloga pediátrica.

El informe epidemiológico señala que desde el 1 de julio hasta el 28 de octubre se habían reportado 25,900 casos a Salud y 903 hospitalizaciones asociadas al virus.

Un dato particular es que en la última semana bajo análisis (22 al 28 de octubre) el total de contagios fue de 3,140 y de estos, solo 99 personas estaban vacunadas. Es la región de Ponce la que más casos reporta, aunque se han registrado casos, prácticamente, en todas las regiones de la isla. Además de Ponce, las regiones de Aguadilla, Mayagüez y Caguas muestran tasas altas de incidencia de casos.

En lo que va de temporada se han administrado más de 278,493 dosis de la vacuna de influenza (hasta el 5 de noviembre). Aunque este número es relativamente bajo, Cardona asegura que ha habido más participación que en años anteriores para esta misma fecha.

“Por primera vez el ‘rate’ con el que las personas se están vacunando está mejor que en otros años. Estamos registrando unas 25 mil dosis semanales y si eso se compara con otros años, podemos decir que no habíamos tenido esa rapidez. Pero, definitivamente, hay mucho trabajo por hacer”, subrayó Cardona.

Recalcó que las vacunas están disponibles desde septiembre y se consiguen en farmacias, hospitales y oficinas médicas. También se realizan algunas actividades comunitarias, incluidas visitas a las regiones más afectadas.

¿Por qué no se declara una epidemia?

De otra parte, la funcionaria aseguró que personal de Salud se reúne semanalmente para estudiar el escenario de contagios de los virus respiratorios que afectan a la población y, aunque hay un brote sostenido de influenza, aún es prematuro declarar una epidemia pues no se han cumplido todos los criterios.

Según definiciones de la propia agencia y que están publicados en su página web, para emitir una alerta de epidemia por el virus de influenza en Puerto Rico se deberán cumplir varios términos, entre estos, que los casos reportados sobrepasen el umbral de alerta, al menos cuatro semanas consecutivas para la temporada vigente.

Por más de 16 semanas consecutivas los casos sobrepasan el promedio histórico, el umbral de temporada y el umbral de alerta.

Otro criterio es que durante los casos reportados durante cuatro semanas consecutivas sobre el umbral de alerta, deberán comprender el 50% del total de casos para la temporada vigente. Las últimas cuatro semanas en análisis, se reportaron 3,140 casos. El total acumulado desde que inició la temporada es 25,900.

Además, la agencia explica que los casos deben estar identificados para todas las regiones de Salud, algo que también se está experimentando en Puerto Rico, aunque con mayor escala en regiones de Ponce, Caguas, Aguadilla y Mayagüez.

De otra parte, se menciona que la tasa de incidencia de casos a siete días debe ser mayor de 100 por cada 100,000 habitantes. Esto representaría un alto nivel de transmisión comunitaria. Según datos de Salud, la tasa de incidencia de influenza por municipio para la semana epidemiológica 43 de la temporada 2023-24 (22 al 28 de octubre) fue de 95.4 por cada 100,000 habitantes. “Los datos son preliminares”, enfatiza el informe.

“Hay una actividad alta de influenza y sabemos que esos números han ido incrementando en las últimas semanas, pero aun así no vemos salas de emergencia documentando una situación de preocupación y estas son facilidades que están obligadas a hacer reportes a Salud. Tampoco vemos una escasez de medicamentos o de pruebas diagnósticas... a diferencia del covid, la influenza es un virus que conocemos, para el que hay vacunas y tratamientos. Es algo que podemos frenar si todas las personas a nivel individual y colectivo toman conciencia del riesgo. Es algo prevenible. Y la vacunación es clave”, dijo Cardona.

“Lo que puedo asegurar es que en Salud nos reunimos semanalmente y estamos vigilando el asunto para tener contramedidas en caso de una emergencia pública. Pero en este momento, hoy, no es la situación. Vamos a seguir monitoreando, promoviendo la vacunación como herramienta preventiva y la agencia se expresará cuando sea pertinente”, puntualizó.

Para buscar un centro de vacunación más cercano visite http://www.salud.pr.gov/influenza o llame al 787-522-3985. También pueden llamar a ese número de teléfono para coordinar vacunación en el hogar para personas encamadas.