Tras el revuelo causado por el derribo de la estatua de Juan Ponce de León, como preámbulo a la visita del rey de España Felipe VI, solo tres pequeñas manifestaciones en las que, principalmente, se reclamó el fin del coloniaje y se repudió a la monarquía se registraron este martes como parte del evento.

La protesta más llamativa la realizaron tres personas a favor de los indios taínos en la Plaza de Armas, frente a la Casa Alcaldía de San Juan.

Mientras, la manifestación más numerosa la encabezó el exrepresentante del Partido Independentista Puertorriqueños, Víctor García San Inocencio. Este llegó acompañado de otros cuatro amigos para reclamar el derecho de los pueblos a decidir sobre sus libertades y status políticos.

El tercer manifestante fue un hombre en solitario que reclamó la definición política de Puerto Rico con Estados Unidos.

Estas manifestaciones causaron malestar entre los curiosos que se congregaron en la Plaza de Armas en un intento en vano de ver al rey. Hubo mujeres que les gritaban a los manifestantes que se debían abochornar y le pedían a la prensa que no los entrevistaran. Todo ocurrió mientras las palomas caminaban y volaban libremente por la plazoleta, en la que se congregaron menos de 100 personas.

El grupo a favor de los indígenas tronó contra la monarquía. Con sus pancartas, le atribuían a España crímenes contra la humanidad, así como “esclavitud, tortura y explotación” contra los taínos.

“Nosotros estamos en protesta. Ya ustedes vieron lo de las estatuas de los opresores y cuando viene el rey de España aquí, pues, lo que quiere es seguir preponderando esta opresión”, afirmó Elba Anaca Lugo, presidenta del Consejo General de Taínos Borincanos, al reclamar respeto por los taínos.

Añadió que “estamos aquí en representación del pueblo en general, del pueblo taíno, del movimiento indígena, que estamos vivo todavía a pesar del genocidio que intentó hacer España y otros pueblos, y nosotros no lo vamos a permitir”.

Lugo estableció que la visita del rey español hace que se rememore esa conquista española, donde se mató a los indígenas. Como parte de su presentación, hizo sonar un caracól.

“Ahora vienen a hacer negocios con nuestra Boriquén. Yo siempre digo que todos tenemos libre albedrío. Pero, sin embargo, hay que decir las cosas, hay que decir la verdad. Queremos que se reconozca que Borinquen es de origen indígena y que todo el pueblo está aquí presente”, indicó.

Otro de los manifestantes, quien se identificó como Jorge García Muñiz, del Museo de la Higüera en Caguas, afirmó que con su protesta buscan crear conciencia sobre la historia.

“Estamos educando al pueblo de que la presencia del rey aquí es ‘non grata’. Representa la validación de muchos crímenes de la humanidad y nosotros no estamos dispuestos a pasar por desapercibido esa visita”, manifestó.

El grupo en el que se encontraba el independentista García San Inocencio, por su parte, cargaba una pancarta escrita en español y en las lenguas que usa el pueblo vasco y catalán para reclamar el derecho a lograr una definición política para estos tres pueblos.

“Somos un grupo independiente que creemos en el derecho de los pueblos a decidir, algo que no ha ocurrido en Puerto Rico, algo que no le han permitido al pueblo vasco, ni al pueblo catalán”, indicó el exlegislador.

Dijo que la lucha que lleva Puerto Rico contra los Estados Unidos, es similar a la que las comunidades vascas y catalanas han librado contra el gobierno español sin éxito.

Asimismo, García San Inocencio reclamó al rey que rectifique o que se avergüence de no permitir la libertad de los ciudadanos.

De paso, el independentista criticó al gobernador Pedro Pierluisi. Lo hizo al aludir que los novoprogresistas criticaban al exgobernador popular Rafael Hernández Colón por estrechar lazos con España y “ahora se está arrastrando por una condecoración. Eso le debe resultar antipático a mucha gente”.

La tercera manifestación la realizó el yaucano Miguel Rodríguez, quien reside en Río Piedras. Se encontraba solo con una gran pancarta de leía: “La rebelión del verano del ‘19 y los resucitados de las elecciones (2020) demuestran que los puertorriqueños quieren resolver el limbo político ya”.

El hombre explicó que hacer su protesta era “oportuna”, porque “es momento de recordarles al rey de España que estamos en las mismas que estuvimos en el 1898″.

Se le cuestionó que podría hacer el rey Felipe VI por la Isla, pero no dio una respuesta precisa. Solo rememoró que España cedió a Puerto Rico “como botín de guerra” a los Estados Unidos y que todavía no hay una solución de status.

“Estamos en las mismas que hace 124 años. Hay que tener conciencia de Puerto Rico”, clamó.

El rey de Españo no pudo observar ninguna de estas manifestaciones, pues no se asomó por el balcón de la Casa Alcaldía a saludar al público que le aguardaba en la Plaza de Armas.