El éxodo y retiro de dentistas en Puerto Rico, unido a la escasez de asistentes dentales, se han convertido en una amenaza para el cuidado de la salud oral, alertó la expresidenta del Colegio de Cirujanos Dentistas, Arminda Rivera.

La odontóloga pediátrica, quien hasta el pasado mes de febrero presidía el gremio, arremetió contra las aseguradoras y le hizo un llamado a la Legislatura a que atienda varios proyectos que atañen a la práctica de la profesión dental.

Rivera dijo que, actualmente, en Puerto Rico hay 1,200 dentistas, de los cuales, solo 800 están activos. El resto está retirado, en la academia o tiene una práctica bien limitada, en vías de cerrar la oficina. El número de asistentes dentales no lo pudo precisar.

“El éxodo sigue siendo un problema bien grave. Diría que en los últimos años unos quinientos dentistas se han ido del país. Y para sorpresa de muchos, de los recién graduados, no son muchos los que se quedan. Por ejemplo, el año pasado en la clase de 2022 se graduaron 40 dentistas y no hubo cinco que quedaran en Puerto Rico ejerciendo”, indicó en entrevista con Primera Hora.

La dentista sostuvo que muchos recién graduados “siguen una especialidad o consiguen uno o dos años más, de un fellow o de alguna pasantía, de una residencia y la gran mayoría, se va a Estados Unidos, porque en Puerto Rico no hay tanta residencia o no hay cupo”.

“El año pasado, básicamente, no se quedaron cinco trabajando y a eso le sumas que una vez terminan de estudiar en Estados Unidos, las ofertas de trabajo allá son mucho mejores”, dijo para destacar que muchos terminan con deudas de estudios que rondan los $300 mil y tampoco tienen recursos para montar oficinas por los altos costos. Además, “tenemos la situación con los planes médicos que le dan largas y largas a los contratos de los nuevos miembros”.

“Cuando tienes una población que más del 90% tiene algún tipo de plan médico, para poder arrancar a trabajar tienes que tener algún tipo de contrato. En Puerto Rico se estima que hay unos 300 mil pacientes que no tienen ningún plan médico ni del gobierno ni de la empresa privada por lo que alguien que quiera arrancar a trabajar desde el primer día tiene que tener algún tipo de contrato”, abundó Rivera.

Dijo que la edad la edad promedio de la población de dentistas en Puerto Rico es de aproximadamente 58 años.

“Hemos encontrado que muchos dentistas terminando los 40 años y los 50 altos, se han ido porque quieren terminar sus años de trabajo de una manera económicamente más estable”, agregó.

“Tenemos un número limitado y no solamente es la escasez es de dentistas, tenemos también una falta de asistentes de dentistas”, sostuvo.

Sin embargo, dijo que las esperanzas están puestas en las dos nuevas escuelas privadas de odontología que abrirían en los próximos años. Sostuvo que la Escuela de Medicina de Ponce, abrió una Escuela de Medicina Dental en febrero pasado que ya fue acreditada. “Durante todo este año están en construcción y esperan en agosto de 2024 empezar su primera clase de odontología. Ya están en la organización del reclutamiento de estudiantes y profesores”, precisó.

Dijo que la Universidad Ana G. Méndez también está organizando una escuela de Medicina Dental “y esperamos que pronto pueda tener una acreditación y comenzar pronto también a reclutar estudiantes”.

Rivera indicó que en 2022 “la actividad en la Legislatura y en el gobierno, fue bien movida”, sobre la fuga de profesionales y el problema con las aseguradoras, pero dijo que “la crisis nosotros estamos tratando de denunciarla desde 2005 y 2006″.

“En 2008 nosotros pusimos una demanda de clase contra las aseguradoras y en este último año nuestros gobernantes descubrieron que hay una crisis de salud. El Colegio de Médicos ha sido bien vocal en este asunto y nos ha ayudado en que todos los grupos médicos, incluyendo grupos de pacientes, hayan salido a denunciar esto públicamente”, afirmó.

Dijo que las comisiones de Salud, del Senado están receptivas a la problemática y el comisionado de Seguros. Alexander Adams, “ha reconocido la situación que hay con las aseguradoras”. No obstante, indicó que es un problema complejo y no hay una sola solución.

“Hay proyectos de ley, pero a veces digo que son para las gradas porque se quedan en nada”, expresó la odontóloga. Mencionó que en 2007-2008 se aprobó una medida dirigida a la negociación colectiva, a permitir que grupos de todos los profesionales de salud se pudieran reunir con las aseguradoras para discutir las condiciones de los contratos. “Eso se aprobó desde 2008 y todavía no se ha podido ejecutar, el reglamento hizo completamente inoperante la ley. El comisionado Adams reconoció eso y está trabajando para ver cómo se enmienda ese reglamento para sentarnos en una mesa con las aseguradoras”, indicó.

“El mayor inconveniente en este país son las aseguradoras. Han tomado el control de la salud en general y controlan todo, quiénes entran al contrato, a quiénes sacan de los contratos, cuándo te van a pagar los contratos, cuánto va a ser esa cubierta”, reclamó Rivera.

Dijo que “el primer problema es el acceso de uno como dentista al contrato y si son menos los proveedores, son menos las citas que se dan y el tiempo que tienen que esperar los pacientes”. Añadió que otro problema son las tarifas. “Como el plan de salud del gobierno no ha aumentado las tarifas, las aseguradoras en sus cubiertas privadas mantienen las tarifas de 1990″, sostuvo.

“Cuando tienes un profesional cobrando lo mismo que hace 30 años, tiene menos recursos para aumentar el salario a los asistentes. Con lo que ganamos los dentistas con los planes médicos, no somos competitivos con los salarios que les pagamos a las asistentes. Son personas talentosas que están en el salario mínimo y con el riesgo y la presión de atender a un paciente”, expresó Rivera y destacó que la queja generalizada de dentistas es de falta de asistentes.

Dijo que el Proyecto de la Cámara 1641, que está pendiente en la Legislatura “es para sentarnos a negociar con las aseguradoras”. Indicó también que tratan de impulsar una medida para que la titularidad de las oficinas dentales quede en manos de dentistas, pues “hay personas sin títulos que están haciendo tratamientos de odontología y mucho de esto viene de los técnicos dentales que están por la libre porque la junta de ellos está inoperante hace unos 13 años”.

Además, dijo que está pendiente el Proyecto 1136 del Senado que busca revisar la ley dental y que la jurisdicción sobre los técnicos dentales caiga en la Junta Dental Examinadora.

“De esa manera la Junta no solo tendría competencia sobre los dentistas y asistentes dentales, sino también sobre los técnicos dentales. El colegio está apoyando este tipo de legislación”, agregó.

Continúan capacitándose

Rivera indicó que el pasado mes de febrero el Colegio de Cirujanos Dentistas de Puerto Rico celebró el Congreso de Salud Oral 2023 que unió a 700 dentistas y asistentes dentales de Puerto Rico, Estados Unidos y Latinoamérica con dos días de educación continua. Además, participaron unos 265 estudiantes y residentes de la Escuela de Medicina Dental (EMD) del Recinto de Ciencias Médicas de la Universidad de Puerto Rico.

Explicó que la agenda educativa incluyó siete conferencias con invitados locales e internacionales, incluyendo la conferencia magistral “Diagnóstico global: Una nueva visión del diagnóstico dental y la planificación del tratamiento”, auspiciada por Colgate y ofrecida por el Dr. William Robbins, conferenciante internacional y profesor clínico en el Centro de Ciencias de la Salud de la Universidad de Texas en San Antonio.

Los profesionales se adiestraron, además, en temas como las alternativas de tratamiento en los pacientes con el espectro autista; los beneficios de la ergonomía en la operatoria dental; el manejo de la hemofilia y la Enfermedad de Von Willebrand y el uso del microscopio y el tomógrafo en la práctica dental.

La conferencia magistral fue dirigida a dentistas, residentes y estudiantes de la EMD y presentó un nuevo modo de planificación de tratamientos conocido como “diagnóstico global”. Este término emergente en el sector de salud dental se refiere a un sistema de planificación de tratamientos con énfasis en los niveles gingivales y surge para remediar las deficiencias relacionadas con métodos tradicionales de diagnóstico en tiempos donde se enfatiza la planificación interdisciplinaria.

Para más información sobre el Colegio de Cirujanos Dentistas de Puerto Rico y sus iniciativas, visite www.ccdpr.org.