El presidente de la Junta de Gobierno de la Universidad de Puerto Rico (UPR), Walter O. Alomar Jiménez, y la vicepresidenta, Zoraida Buxó Santiago, salieron hoy a sus cargos tras haberse vencido sus nombramientos desde el pasado 20 de abril.

Ambos funcionarios –que habían sido nombrados por el renunciante gobernador Ricardo Rosselló Nevares el 23 de mayo de 2017– se encontraban a la espera de la decisión de la gobernadora Wanda Vázquez Garced, quien rescindió de ellos.

“Como es de conocimiento público, los nombramientos de la Lcda. Zoraida Buxó y de este servidor, como integrantes en la Junta de Gobierno de la Universidad de Puerto Rico, cumplieron su término. Por lo que damos paso a los nuevos miembros del organismo rector y concluimos nuestras funciones con la satisfacción del deber cumplido”, manifestó Alomar Jiménez en declaraciones escritas.

Por el momento, el ingeniero Emilio Colón Beltrán, representante claustral en la Junta de Gobierno, asumirá las riendas del ente rector interinamente.

El Senado ya confirmó dos nombramientos realizados por la mandataria -Jorge l. Valentín Asencio y Mayda M. Velasco Bonilla-, pero aún no se han integrado al cuerpo colegiado porque no han juramentado, indicaron los representantes estudiantiles en declaraciones escritas.

“En el día de hoy la gobernadora Wanda Vázquez Garced ha determinado rescindir los nombramientos vencidos del Lcdo. Walter Alomar y la Lcda. Zoraida Buxó”, manifestaron en su página de Facebook.

Sin embargo, Marcus Ramos Cintrón, quien representa a los estudiantes graduados, y Joebeck Álvarez Guma -por los universitarios subgraduados- se mostraron esperanzados con los cambios venideros.

“Esperamos que el cambio que se perfila para la dirección de la Junta de Gobierno repercuta en un cuerpo donde impere la buena voluntad, transparencia, el respeto al disenso, la democracia participativa y el ánimo de consenso”, añadieron al escrito.

“Privilegio”, “honor” y “orgulloso”

Bajo la administración de Alomar Jiménez y Buxó Santiago el costo por estudiar en la UPR se duplicó. En abril de 2018 hubo un alza de $56 por crédito a $115. Un año después volvió a aumentar a $124 por crédito, o lo que equivale a un aumento del 121.43 %.

No obstante, el ahora expresidente del ente rector manifestó que “siempre” estará “orgulloso de haber servido” a su alma mater y a su País “en un momento histórico”.

En estos últimos tres años, la UPR se ha enfrentado a múltiples desafíos económicos, fenómenos atmosféricos, sismos y una pandemia.

“Dejo una institución estable, acreditada y en un proceso adelantado de transformación que la colocará en el sitial que se merece. Desde la Junta de Gobierno, junto al presidente [Jorge] Haddock, logramos, no solo la acreditación de la institución por un nuevo término, sino estabilidad fiscal, y el cumplimiento de la entrega a tiempo de los estados financieros auditados, entre múltiples proyectos en progreso que provocarán grandes resultados en el principal centro docente de Puerto Rico”, destacó.

Asimismo, aprovechó para agradecer la confianza depositada en él para ejercer las funciones del cargo.

“Agradezco a todos los presentes y pasados miembros de la Junta de Gobierno por su gestión y diligencia en la toma de decisiones, así como al presidente, el doctor Jorge Haddock, por liderar la institución responsablemente y conforme a las encomiendas de la honorable Junta de Gobierno de la Universidad de Puerto Rico”, dijo.

Por su parte, la ahora exvicepresidenta se expresó “complacida” por la labor que realizó durante los pasados tres años y se mostró confiada en que los entes de gobernanza de la UPR continuarán trabajando “mano a mano, aspirando siempre a la excelencia, y creando oportunidades y un mejor futuro para nuestra razón de ser, los estudiantes”.

“Fue un privilegio y un gran honor que mis compañeros de Junta me confiaran el liderato de cambio en asuntos tan trascendentales como lo fue la selección de un presidente mediante procesos abiertos e inclusivos, y los esfuerzos de transformación de un sistema de retiro sostenible para las nuevas generaciones de empleados docentes y no docentes de la Universidad”, añadió Buxó Santiago.