El presidente del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), Rubén Berríos Martínez, catalogó como un “acto vil” y un “atropello” el que los gobiernos de Francia, Italia, Portugal y España le impidieran este martes al presidente de Bolivia, Evo Morales, sobrevolar su espacio aéreo ante la sospecha de que llevaba en su avión al extécnico de la CIA, Edward Snowden, quien es buscado por los Estados Unidos.

“En mi carácter de presidente honorario de la Internacional Socialista (IS) y vicepresidente de la Conferencia Permanente de Partidos Políticos de América Latina (COPPPAL), condeno de la forma más enérgica la acción de la cual ha sido víctima el presidente de Bolivia, Evo Morales. Dicha acción contra un jefe de estado constituye un insólito y abusivo atropello, no sólo contra el primer presidente indígena en la historia de América Latina y contra el pueblo boliviano, sino también una ofensa y un insulto a todos los latinoamericanos y a todos los hombres y mujeres de buena voluntad en el mundo entero”, expresó Berríos Martínez.

El dirigente independentista, así como el gobierno boliviano y varios presidentes latinoamericanos, piensa que esta acción política constituyó un “secuestro”.

“Los gobiernos de Francia, Italia, Portugal y de España, siguiendo indignamente las órdenes de los Estados Unidos, secuestraron al presidente de Bolivia y pusieron en riesgo su vida. Esta acción constituye un acto vil de piratería imperial que viola el derecho internacional y avergüenza a los hombres y mujeres que en esos países defienden la democracia. Particular vergüenza deben sentir los gobiernos de España y Portugal por sus lazos históricos con la América Latina, y el gobierno de Francia por ser su presidente miembro de un partido socialista”, expuso.

Berríos Martínez agregó por escrito que “desde anoche (martes) he estado en comunicación con las autoridades pertinentes, tanto de la IS como de la COPPPAL, para que estos organismos hagan sentir por todos los medios y mecanismos pertinentes la indignación del mundo entero ante este grave atropello contra el presidente de Bolivia”.

Morales, que regresaba de Moscú tras participar en una reunión de países productores de gas, permaneció varado 13 horas en el aeropuerto de Viena ante la negativa de Francia, Italia, Portugal y España de permitirle sobrevolar sus territorios. Al cabo de ese tiempo, el avión de Morales pudo partir hacia las islas Canarias, en España, donde hizo una escala técnica en su camino a La Paz, Bolivia.