Se queda en su puesto, por ahora, la secretaria del Departamento de Justicia, Wanda Vázquez Garced.

Así lo expresó ayer Ricardo Rosselló Nevares durante una conferencia de prensa en la cual reiteró la confianza que goza la funcionaria “por el trabajo que ha hecho”.

La secretaria de Justicia está siendo investigada Oficina del Fiscal Especial Independiente y la Oficina de Ética Gubernamental –referida por el propio gobernador– por intromisión en un caso de escalamiento relacionado con su hija al reunirse con los fiscales.

“La secretaria cuenta con mi confianza. Esto es un proceso que se está llevando a cabo, el proceso continúa y no hay muchos detalles. En este proceso, ella ha contado con mi confianza con el trabajo que ha hecho. Al igual que en otros procesos, vamos a esperar a que esas investigaciones culminen para entonces tomar determinaciones”, indicó en un audio enviado por La Fortaleza.

Asimismo, a preguntas de periodistas, rechazó que estas investigaciones sean productos de una pelea interna de personas del Partido Nuevo Progresista.

El jueves, el presidente del Senado, Thomas Rivera Schatz le reiteró el pedido de renuncia a Vázquez Garced.

“La secretaria de Justicia debe renunciar a su cargo y si no renuncia el gobernador la debe destituir… Está incapacitada y desacreditada para ocupar el cargo”, sostuvo el legislador en su turno en la Sesión Ordinaria del Senado.

Las palabras de Rosselló Nevares se suscitaron en conferencia de prensa de la primera EXPO Alimentaria Puerto Rico.

No es la primera vez

En agosto de este año, Primera Hora reseñó la denuncia de la exponente del género urbano Adriana Nicole Vázquez Pérez, conocida como Audri Nix, en la cual alegaba trato preferencial en el proceso judicial en su contra entablado por el reguetonero Jorge Álvaro Díaz Rodríguez, conocido como Álvaro Díaz, hijo del juez Jorge Díaz Reverón e hijastro de Wanda Vázquez.

El exponente urbano denunció a su expareja por violaciones a la Ley 54 por los artículos de maltrato, maltrato agravado e incumplimiento de una orden de protección.

En la vista del pasado 14 de agosto, el hijastro de Vázquez Garced estuvo acompañado por tres funcionarios públicos: la técnica de fiscalía Jorma Cruz; el consejero de víctimas Juan Malavé y la manejadora del caso, Sandra Román, que se autodenominaron como su “grupo de apoyo”.

Esta asignación de funcionarios públicos a una víctima fue considerada por el abogado de Audri Nix como poco usual.

“Sinceramente, tengo mucho miedo porque siento que, definitivamente, él está mucho más beneficiado que yo y estamos hablando de mi vida y mi libertad. No sabemos qué puede suceder. Hay una influencia y no sabemos cómo eso puede afectar el caso”, indicó la mujer en aquel entonces.