El gobernador Ricardo Rosselló convirtió en ley su llamada reforma laboral, que tiene el nombre de Ley de Transformación y Flexibilidad Laboral.

La firma de la medida se realizó en conferencia de prensa celebrada en una lavandería de Santurce. La ley establece reducciones al Bono de Navidad, elimina la Ley de Cierre, y modifica a favor de los patronos la forma de contratar y despedir empleados.

Rosselló y funcionarios de su administración, así como representantes del sector privado, defienden  la medida como pieza necesaria para la creación de empleos, aunque el gobernador reconoce que hacen falta pasos adicionales, como una reforma de permisos. 

Asimismo, la medida ha sido duramente criticada por múltiples sectores -incluyendo algunos economistas y representantes del sector laboral- que anticipan una contracción económica. Desde que se radicó y se aprobó en la legislatura pasaron unos 9 días, solo tuvo dos días de vistas públicas -la Cámara de Representantes no le permitió deponer al movimiento obrero- y hubo al menos una protesta en el Capitolio.