Con Voto2024, hoy Primera Hora reseña el último recorrido de todos los municipios de Puerto Rico para conocer el sentir de los ciudadanos antes de las elecciones generales. Cuáles son sus mayores preocupaciones y qué acciones toman los alcaldes y alcaldesas ante los problemas expuestos, lo puedes leer en primerahora.com

Arroyo. El abandono del balneario de Punta Guilarte y del área del malecón es un asunto que sobresalió entre las preocupaciones de arroyanos.

Sentado a la orilla del mar, frente a varias estructuras en ruinas, el ciudadano Rubén de Cruz afirmó que “lo más que me preocupa es el malecón” de Arroyo.

Relacionadas

Recordó “como era antes, que los barcos anclaban aquí y el turismo venía. Pero mira cómo está ahora eso, bien abandonado. Ahí no hay nada, nada. Y tienes suerte que (hoy) no tiene mal olor como otras veces”.

Agregó en entrevista con Primera Hora que esa área se encuentra en tan mal estado de abandono hace más de una década, aunque parte de la estructura física del paseo a la orilla del mar fue remodelada “hace como cuatro años”.

Rubén de Cruz
Rubén de Cruz (Suministrada)

Sugirió al Municipio que dé la pelea para buscar fondos, para rehabilitar la zona, de manera que pueda tener “botes anclados ahí y esto lleno de turistas aquí”.

Albert Santos Pagán secundó esa preocupación por el abandono en el área del malecón, agregando que “no hay rampa pa los pescadores”, pues la que había “está destruida desde (el huracán) María (2017) y los pescadores tienen que ir hasta el balneario. Tampoco está operando la pescadería, pues “eso está en pleito ahí, en controversia de los pescadores con él (alcalde, Eric Bachier Román), y eso lleva años cerrado ahí, después que gastaron un dineral (en construirla)”.

Albert Santos Pagán
Albert Santos Pagán (Suministrada)

“Otra preocupación aquí es el balneario (de Punta Guilarte). Aquí hay un balneario de los mejores, le dicen el Chiriópolis, y él (alcalde) lo cogió y está abandonado también. Hay unas cabañas allá que eran del gobierno, y también el mar socavó y unas se cayeron, y la playa no la limpia, no tiene baños, alumbrado tampoco. Eso es un desastre”, indicó.

Exhortó al municipio a “ponerse las pilas” para atender esa situación y sugirió aprovechar los jóvenes que están empleando por cuatro horas al día “y ponerlos, por lo menos, a limpiar la playa”.

La joven Christy Alicea, por su parte, dijo que le preocupaba la falta de iluminación en algunas carreteras. En particular, mencionó el área “donde vive mi tía, para Yaurel, Palmarejo Bajo”, que aseguró es una carretera por donde “pasan carros, sí, pero hay secciones que ante había luz, pero ahora no hay, y eso es demasiado de oscuro. Uno pasa, y aunque tengas luces largas, es un problema”.

Christy Alicea
Christy Alicea (Suministrada)

Comentó que ha visto “que han puesto (luces) en algunos sitios”, pero desconoce si llegarán a esa área, y sugirió que el Municipio la tome en cuenta, y si es necesario, le “meta más presión a los de LUMA (Energy)”.

De igual forma, dijo haber visto trabajos de pavimentación en algunas vías, pero le preocupa que hay áreas donde no se ha hecho, como ocurre en esa misma carretera, donde “hay dos agujeros, y están ahí pegaítos, que si tú quieres esquivar este, vas a coger el otro. Y la carretera principal como tal, también tiene muchos hoyos. Y más arribita, cerquita de los buzones del sector Sierrita, hay un hoyo bien grande, en el mismo medio de la carretera”.

Sugirió que, al menos la vía “de abajo, que es municipal”, le den la atención que necesita, y hagan las gestiones para que se pavimente la carretera estatal.

William Santiago, de La Riviera, también se mostró preocupado por el estado de deterioro en que se encuentra el balneario de Punta Guilarte.

Quisiera que eso fuera el balneario que era antes, que era el número uno de todo Puerto Rico”, sostuvo, agregando que, en estos momentos, “las cabañas están esbaratás”.

Asimismo, expresó que “me gustaría también que dragaran el malecón. Pienso que sería un centro de atracción al turista”.

Antes yo me tiraba ahí, los botes cuando llegaban de pescar se parqueaban ahí. Pero el mantenimiento no se dio y está todo eso tapado ahí”, lamentó.

Recomendó que el Municipio busque una barcaza y “le monte una excavadora encima”, y empiece “a romper poco a poco” para dragar el malecón. Y de igual forma, exhortó a limpiar la playa y remodelar las cabañas y las piscinas “que tanto nos gustaban”.

El joven Gabriel Hernández dijo sentirse preocupado por las muchas necesidades que hay en el municipio, como el abandono de personas necesitadas y la falta de policía tanto estatal, como municipal, “que lo que hay son dos policías municipales”.

“Hay viejitos que tenemos abandonados, que están pasando necesidades. No les están dando el cuidado que necesitan”, lamentó.

También denunció la falta de atención al sector de donde es oriundo, al explicar que “soy nacido y criado en Las Arizonas, en el barrio San Felipe, y llevamos más de 15 o 20 años que no se nos remodelan las calles. Eso está esbaratao. La cancha nos la clausuraron. El barrio está desatendido en todas las necesidades”.

Exhortó al Municipio a “activar un grupo de líderes comunitarios que vayan a atender las necesidades de cada persona, y llamó a no hablar, sino actuar, de la manera más rápida” y con compromiso.

Como aspecto positivo, tanto Santiago como Hernández resaltaron la apertura de la pista, “que es nueva y la remodelaron”.

Por su parte, don William Santiago dijo que le preocupa que no se está impulsando el desarrollo económico, y que hay muchas estructuras abandonadas que no se están aprovechando.

Sugirió “empujar más el comercio y el turismo, y darles más atención a las estructuras ya existentes, expropiarlas si el dueño no le interesa y ponerlas a funcionar el algo que le produzca al pueblo”.

Conoce más

  • Cuenta con unos 15,843 habitantes, según el Censo de 2020. Actualmente, cuenta con 15,078 residentes y su mediana de edad es de 43.9 años.
  • Arroyo inicia su historia como un barrio de Guayama. Fue en 1855 cuando se fundó como municipio.
  • En 1894, había en Arroyo 62 estancias de frutos menores, dos minas de hierro y una de bronce. Para ese entonces la pesca, también, era fundamental para la economía arroyana.
  • A sus costas llegaban pescadores de diferentes partes del mundo incluyendo áfrica, España y Dinamarca.
  • Según datos de la Oficina del CENSO de los Estados Unidos, los residentes de Arroyo están entre los municipios catalogados como los más pobres de Puerto Rico, pues tienen una media salarial anual que no supera los $20,000.