El COVID-19 vuelve a sacudir al Departamento de Corrección y Rehabilitación (DCR), pero en esta ocasión la propagación de la variante Ómicron ha provocado un sinnúmero de brotes que han desencadenado en que, al menos, haya 71 contagios entre guardias correccionales y empleados civiles de la agencia.

“Este aumento no lo habíamos tenido en ocasiones anteriores”- Ana Escobar Pabón, secretaria del DCR

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La información la confirmó a Primera Hora la secretaria del DCR, Ana Escobar Pabón, al destacar que de los afectados 47 corresponden a oficiales correccionales y 24 a empleados civiles de diversas instituciones.

Es la primera vez en casi dos años de pandemia que el DCR enfrenta unos brotes simultáneos y que afecten en un mismo periodo a más de 14 guardias correccionales. Hace apenas un par de semanas la agencia logró sobrepasar a una gran crisis de contagios por COVID-19 entre confinados, donde se vieron afectados 686 reos y 12 empleados de Corrección.

“Al momento, la información que tengo por lo que me informaron en la mañana es que van 71 casos (en esos grupos) y si hay más positivos en lo que transcurre del día lo sabré en el próximo informe... te puedo decir que la mayoría de los guardias correccionales, más de 20, son del complejo correccional de Bayamón y también hay cerca de 15 en Guayama”, acotó la funcionaria.

En cuanto a los empleados civiles, explicó que se trata de 24 contagios identificados en diversas instituciones carcelarias y también hay seis casos de personas que laboran nivel central de la agencia.

“Este aumento no lo habíamos tenido en ocasiones anteriores. Estamos viendo en la agencia el reflejo de lo que ocurre actualmente en la comunidad y eso es sumamente preocupante para nosotros”, manifestó Escobar Pabón.

Afortunadamente, ni en el brote anterior (el pasado octubre) ni en el que surge en medio del repunte navideño se han reportado hospitalizaciones o fallecimientos relacionados al coronavirus en las cárceles. Durante la pandemia -que inició en marzo del 2020- han muerto cuatro oficiales y cuatro confinados por complicaciones relacionadas al COVID-19.

Escobar Pabón dijo que ha habido constante comunicación con los empleados para que se tomen todas las medidas de contención necesarias y así evitar que el coronavirus siga propagándose entre la plantilla.

Además, se tomaron acciones adicionales en coordinación con el Departamento de Salud y Salud Correccional, incluyendo separar a cuarentena en sus hogares a todas “las personas sospechosas de haber sido un contacto de un positivo por más de 15 minutos y sin mascarilla, estén o no con sintomatología”.

“Los hemos ido retirando pero necesitamos cooperación de que si se sienten mal o presentan algún síntomas que en muchas ocasiones confunden con una gripe, se puedan retirar para hacerse pruebas”, sostuvo.

De hecho, mencionó que tras un acuerdo con el Departamento de Salud la agencia adquirió 2,000 pruebas de antígenos para realizar análisis de detección del SARS-CoV-2 entre aquellos que presentan síntomas asociados a COVID-19 o que tengan sospecha de estar contagiados.

“Comenzamos hoy a realizar esas pruebas a empleados y contratistas en todos los complejos correccionales y es un ejercicio que vamos a repetir hasta el 3 de enero, mientras duren las pruebas”, expresó al explicar que son 31 instituciones correccionales alrededor de la isla.

Asimismo, añadió que también lograron acceso al nuevo programa de pruebas caseras gratuitas que impulsó el presidente Joe Biden como parte de su plan invernal contra el COVID-19, el cual inició hoy con la distribución de 10,000 kits que fueron recibidos por Community Health Foundation of Puerto Rico, en Bayamón. Algunos empleados del DCR solicitarán la prueba gratuita a través de un correo eléctronico y el paquete les será entregado de acuerdo al turno que les otorguen.

“Para nosotros lo más importante es que el personal esté saludable y que protejan a sus familias”, dijo Escobar Pabón.

En cuanto a vacunación, expresó que el 88% de ls 5,977 empleados de la agencia (incluyendo a cerca de 4,500 guardias correccionales) cuenta con la dosis de refuerzo de vacunación. Aseguró que solo un “grupo ínfimo, de no más de 25 personas” no se han vacunado y han presentado excusas médicas o de religión.

La baja de empleados contagiados en aislamiento y los que están en cuarentena a espera de pruebas de detección ha ocasionado un disloque en los turnos de trabajo, puntualizó la secretaria del DCR.

“Como resultado de estos casos positivos en las instituciones correccionales y el retiro de varios compañeros hemos tenido que tomar medidas en los turnos de servicio y expandirlos a 12 horas de trabajo. De esta forma garantizamos la seguridad en las facilidades correccionales”, dijo al explicar que son cuatro instituciones de adultos y una de menores las que han tenido que hacer el ajuste que está previsto hasta el 7 de enero “y siempre observando que surjan nuevos casos”.

Bajo control los casos entre los confinados

En cuanto a contagios entre los confinados, la funcionaria indicó que al momento se mantienen bajo control y totalizan seis casos.

“Tenemos tres casos positivos en el Centro de Detención del Oeste, un caso en el Centro Médico Correccional que proviene del anexo de Sabana Hoyos (Arecibo), un caso del Centro de Ingreso en Bayamón; y un caso de una reclusa que salió para un pase familiar y llegó contagiada”, acotó.

En cuanto a la vacunación en la población correccional dijo que el 98% está completamente vacunado y con su dosis de refuerzo. Según datos de la agencia hay actualmente 7,104 personas en la población correccional.

“Aun así nos mantenemos en realización de pruebas aleatorias. Para esta semana se seleccionaron tres instituciones y estaremos programando otras”, subrayó.

Asimismo, dijo que se cancelaron los pases familiares sin custodia para aquellos confinados que están en programas de reintegración a la comunidad pues, precisamente, uno de los contagios surgió en uno de esos pases durante el wikén de Nochebuena y Navidad. Actualmente, son unos 45 los confinados y confinadas que tienen pases familiares sin custodia.

De otra parte, la funcionaria dijo que el lockdown que se propició con el repunte de octubre y noviembre quedó sin efecto el 7 de diciembre.

“Sin embargo, no estamos yendo a las salidas de brigadas ni se están haciendo actividades multitudinarias en las instituciones”, enfatizó.

Mientras, aclaró que las visitas continúan en pie pero solo se aceptan dos personas por confinado y se les exige tener el refuerzo de las vacunas. Los niños pueden acudir a las visitas, pero deben cumplir con medidas estrictas de uso de mascarilla. “Aunque las visitas son sin contacto, queremos proteger a esos menores”, dijo.

Los nuevos brotes en Corrección surgen en medio de un repunte histórico de casos de COVID-19 en la isla, particularmente atribuidos al avance en la propagación de la variante Ómicron.

Para este jueves la positividad en la isla se ubicaba sobre un 26%. Hasta las 4:30 de la tarde del miércoles se habían detectadoen Puerto Rico 87,469 contagios de COVID-19 en diciembre cuando se han hecho 790,699 pruebas moleculares y de antígeno. A la fecha el 27 de diciembre tiene la mayor cifra de detecciones con 14,139 casos. Cabe destacar que todas estas cifras cambian constantemente a medida que los datos entran en tiempo real al BioPortal de Salud.

En términos de hospitalizaciones se informó que hasta el 28 de diciembre habían 309 personas hospitalizadas que corresponden a 223 adultos (24 en cuidados intensivos) y a 84 pediátricos (uno en intensivo). La cantidad de ingresos representa un incremento de 41 casos, en comparación con el reporte del martes. Además, se informaron tres muertes adicionales por COVID-19, todas personas mayores de 60 años. El total de fallecimientos ocurridos en la pandemia es de 3,295. En diciembre han fallecido 25 personas.