El director del Instituto de Estadísticas de Puerto Rico, Mario Marazzi, renunció hoy de forma inmediata, informó a través de una carta.

Marazzi renuncia tras una larga disputa con la actual administración y tras alegaciones en su contra de violencia de género.

En la misiva, dirigida al presidente de la Junta de Directores del Instituto, Arnaldo Cruz Sanabria, Marazzi le recriminó al funcionario que "sus acciones han abierto la puerta a que la política partidista se apodere de esta importante institución, lo cual nunca había ocurrido en el pasado, bajo ninguna de las cuatro administraciones gubernamentales para las que hemos trabajado".

En la carta, Marazzi denuncia que Cruz Sanabria violó la ley al permitir que se nombrara más de un funcionario de gobierno a la junta del Instituto, se impusieron restricciones a los empleados de la dependencia y que asuntos confidenciales suyos fueron divulgados.

"No hay capital humano que pueda mantenerse a largo plazo sujeto a este nivel de maltrato por parte de su patrono", dijo Marazzi.

Asimismo, el renunciante funcionario reprochó, en un comunicado de prensa emitido, que los problemas personales que enfrentó luego de que su exesposa le radicara una orden de protección por violencia de género se tornaran públicos, al punto que le afectó emocionalmente. 

"A finales de octubre de 2018, me separé voluntariamente de mis funciones para atender un asunto personal.  En violación de una orden de mordaza judicial, y en contra de mi voluntad, los detalles de este asunto fueron compartidos con los medios.  Aunque se me pidió que reaccionara, no lo hice por respeto a los procesos judiciales.  Mi silencio llevó a mucha especulación adicional en mi contra, que hasta el momento no he podido contestar, porque la orden de mordaza sigue vigente.  Por otro lado, en la medida que se violó la confidencialidad de dicho asunto, mi salud comenzó a deteriorarse". 

Dijo que toda la situación fue aprovechada por el gobernador Ricardo Rosselló para cambiar la constitución de la entidad y promover su salida. 

"A finales de noviembre de 2018, el mismo día que yo atendía dicho asunto personal en un Tribunal, el gobernador, quien ya había pedido mi renuncia, aprovechó la coyuntura para cambiar dramáticamente la composición de la Junta de Directores del Instituto de Estadísticas.  De contar con cuatro doctorados y tres mujeres, en cuestión de semanas, la Junta de Directores pasó a contar con ningún doctorado y una sola mujer.  Además, por primera vez, se ha permitido que la Junta de Directores del Instituto tenga más de un funcionario de gobierno, contrario a lo que requiere la Ley orgánica del Instituto de Estadísticas.  Pero, peor que eso, por primera vez, virtualmente, todos los miembros de esta Junta ilegal han realizado donativos políticos y tienen vínculos económicos estrechos con el gobierno. El cambio es claro y notable: tenemos una Junta menos educada, menos femenina y por primera vez politizada en su mayoría", manifestó. 

Marazzi dijo que desde entonces enfrenta una campaña de descrédito y de represalias en su contra, que finalmente llevaron a sus suspensión el pasado 30 de enero.

Explicó que radicó varias demandas para defenderse, pero que ya desiste de las mismas porque "no intereso perseguir asuntos políticos". 

"Lo único que me ha motivado es hacer valer la Ley del Instituto de Estadísticas, compromiso que adquirí hace más de 10 años cuando juramenté al cargo", alegó.

En la demanda, Marazzi aludió a que habían tres nombramientos controvertibles para la Junta del Instituto. Estos eran los de Manuel Laboy Rivera, Harry Santiago Pérez y Alex López Echegaray. El problema que enfrentaba es que los primeros dos todavía están bajo la evaluación del Senado. 

Se suponía que esta tarde el abogado de Marazzi, Frank Torres Viada, presentara un escrito al juez Anthony Cuevas Ramos, del Tribunal de Primera Instancia de San Juan, en el que presentara los argumentos que permitieran determinar si la Rama Judicial debe o no inmiscuirse en la legalidad de unos nombramientos realizados por el gobernador y que actualmente están bajo la consideración del Senado.

Torres Viada no contestó las llamadas de Primera Hora para conocer cómo procedería el caso, sobre todo cuando los abogados del estado están solicitando que Marazzi pague por los honorarios y costas invertidos.

Marazzi ocupa el puesto desde la fundación del Instituto en el 2007, por lo que trabajó bajo los gobernadores Aníbal Acevedo Vilá, Luis Fortuño, Alejandro García Padilla, y ahora Ricardo Rosselló. El economista trabajaba en el Banco de la Reserva Federal de Estados Unidos antes de su reclutamiento, por lo que emigró con su familia de Washington a Puerto Rico para dirigir el instituto, según la carta.

Para exponer lo que le depara en el futuro, Marazzi indicó que comenzará "a trabajar con varios clientes privados que interesan de mis servicios. Por respeto a los clientes, por el momento, no voy a estar anunciando quienes son.  En su momento, ellos podrán hacer los anuncios correspondientes, si así lo desean.  Aprovecho para decir que se trata de entidades privadas con fines de lucro, que el Instituto de Estadísticas nunca ha regulado, ni nunca adjudicó asunto alguno relacionado a ellos, ni ha hecho negocios con ellos.  Esto además me permitirá estar totalmente desligado de asuntos públicos, y enfocado en atender los asuntos de la custodia de mi único hijo, a la par que dedico tiempo a mi familia y seres queridos".


"Le deseamos éxito al Dr. Marazzi en sus planes futuros y que pueda resolver sus problemas personales asociados con la orden de protección en su contra.  Poniendo un fin a este capítulo, pondremos todos nuestros esfuerzos al mejoramiento de las estadísticas del país", indicó a la prensa la entidad, presidida por Arnaldo Cruz.

En su comunicado, el Instituto elabora los próximos pasos a seguir, que incluyen propuestas enmiendas a la ley orgánica, culminar una evaluación externa para identificar "áreas de oportunidad" y que esto servirá de guía en la designación de un nuevo director ejecutivo que ocuparía la plaza por 10 años.