Llegó, besó y se fue.

El alcalde de Guaynabo, Héctor O’Neill, llegó de imprevisto a la inauguración del comité Estadistas Unidos por Guaynabo, en la avenida Esmeralda, opacando el motivo de la reunión: celebrar el junte de estadistas en el municipio de cara al plebiscito de status del 11 de junio.

Escudándose entre la gente que rodeaba la tarima frente al comité, el alcalde imputado de varios actos de hostigamiento sexual y laboral abrazaba a sus seguidores mientras evitaba insistentemente a la prensa y haciéndose de oídos sordos a las preguntas sobre la demanda que le radicó hoy la Oficina de la Procuradora de las Mujeres, que impacta al municipio con $30 mil por la “negligencia crasa” en el manejo de los casos que se le imputan al alcalde y otros funcionarios bajo su mando.

O’Neill dio constantemente la espalda a reporteros, tratando de huir de las cámaras. Entre los que saludó estuvo el cantante Glenn Monroig, quien tiene un contrato de consultoría administrativa en el Senado por un monto de $30 mil y que es vigente hasta el 30 de junio.

Finalmente, el alcalde se movió rápidamente a un Jeep y se fue del lugar sin pronunciar palabra.

Sin comentarios

Más temprano en la tarde, los senadores Carmelo Ríos y Migdalia Padilla llegaron por separado a la inauguración del comité, y al preguntarle sobre las imputaciones contra O’Neill dijeron que “hay que dar espacio a la investigación”.

Cuando se le cuestionó al presidente del Senado, Thomas Rivera Schatz, sobre qué pensaba de la recomendación del Departamento de Justicia de asignarle un FEI a O’Neill, el vicepresidente del Partido Nuevo Progresista ripostó: “¿En serio tú me vas a preguntar eso aquí?” y se dio la vuelta, marchando hacia la tarima.

Sobre la actividad, varios líderes del PNP dieron mensajes a favor de la estadidad y repitieron el llamado de “poner la equis bajo el triángulo” el próximo 11 de junio.