El representante novoprogresista Juan Oscar Morales cuestionó hoy quién está al mando del Negociado de Ciencias Forenses (NCF), pues el comisionado Edwin Crespo sometió un certificado médico por tres meses adicionales, mientras la subcomisionada Mónica Menéndez también se reportó enferma hasta este viernes 10 de agosto.

Morales, quien preside las vistas públicas que la Comisión de Salud de la Cámara de Representantes que investiga alegadas irregularidades administrativas y de almacenamiento de cadáveres en el ICF, canceló nuevamente la audiencia a la que estaba citada para mañana jueves la subcomisionada.

El legislador indicó que recibió una comunicación escrita del comisionado de Seguridad Pública, Héctor Pesquera, informándole que Crespo sometió otro certificado médico y también le solicitó que excusara a Menéndez de la vista pública pues le fue extendido un certificado médico, hasta el 10 de agosto.

Morales sostuvo que Crespo sometió certificado médico, pero Menéndez no ha sometido la excusa médica a la comisión legislativa.

La subcomisionada sufrió un mareo cuando comenzaba a declarar el viernes de la semana pasada y la vista fue aplazada para este martes, pero fue cancelada al igual que de mañana por el percance de salud de la funcionaria.

Morales dijo que la audiencia será reprogramada para la semana próxima, pero de momento, no ofreció fecha.

En torno a los documentos que le requirió a la subcomisionada y al NCF, Morales dijo que le han entregado “menos de la mitad”.  

 El legislador novoprogresista requirió el documento que designa a Menéndez al puesto de subcomisionada y la certificación de que cumple con todos los requisitos y cualificaciones para el puesto, así como los hallazgos de la investigación interna contra empleados del NCF por ofrecer información a las comisiones legislativas el pasado 20 de julio.

Menéndez también debe entregar hojas de asistencia y la bitácora sobre el manejo de un cuerpo que se alega llegó el 3 de julio en estado descomposición y fue trasladado al área de vagones de la morgue la madrugada del 17 de julio. Además, se le requirió al protocolo de recogido de AND de los cadáveres y el reglamento, entre otros documentos.

El representante Morales acogió que soldados de la Unidad Mortuoria de la Reserva del Ejército de Estados Unidos removieran ayer uno de los controvertibles vagones de almacenamiento de cadáveres del patio del NCF.

“Por lo menos se llevaron el que nosotros cuestionamos desde el primer día. Había sido vaciado el 30 de julio, pero ella (la subcomisionada) no pudo decir dónde están los cadáveres que fueron removidos”, indicó el legislador.