Una resolución conjunta busca iniciar un proyecto piloto que asigne fondos de la Administración de Familias y Niños (ADFAN) para un cuidador de un adulto mayor que sea designado por la familia.

La pieza legislativa, de la senadora Keren Riquelme, responde al objetivo de ir fomentando una cultura donde el adulto mayor permanezca con su familia inmediata como primera opción ante la necesidad de cuido prolongado.

“En Puerto Rico existe un gran problema de abandono de adultos mayores, sea en hospitales, centros de cuidado prolongado o hasta en hogares. De acuerdo con los datos que ha publicado la ADFAN, alrededor de 60 envejecientes son dejados a su suerte cada mes. Ese es un número impresionante. Lo que buscamos con esta resolución es incentivar a los cuidadores familiares, la persona o personas que la familia asigna a cuidar de estos adultos mayores, para que ellos puedan proveer también los recursos económicos que permitan a estos envejecientes tener una mejor calidad de vida”, dijo la Senadora del Partido Nuevo Progresista.

Según múltiples estudios, el costo de cuidar y proveer por una persona de la tercera edad en Puerto Rico ronda entre los 800 a 3,500 dólares al mes, dependiendo de condiciones médicas y necesidades especiales, entre otros factores.

“La medida que estaremos sometiendo, para que el Senado la atienda con premura cuando inicie la próxima sesión en el mes de enero, ordena a la ADFAN identificar recursos ya disponibles para asignarlos a este proyecto pilotos y que usualmente son destinados para el cuido mediante terceros, en este caso centros de cuido por ejemplo, sean dirigidos a los cuidadores familiares que son esos hombres y mujeres que día a día dedican gran parte de sus vidas al cuidado de sus padres u otros familiares mayores de 65 años”, expresó finalmente la legisladora.

Esta propuesta surge de modelos existentes en Singapur y el estado de New York.