Al rememorar lo “sacrificado y costoso” que le resultó lanzar su candidatura independiente a alcalde de Cabo Rojo en la década de los años 80, Santos “El Negro” Ortiz todavía no ve un panorama alentador para que personas desligadas a un partido político puedan lograr puestos electivos.

Aludió a que el surgimiento de partidos emergentes, como los son Proyecto Dignidad y el Movimiento Victoria Ciudadana, así como lo arraizado que está el pueblo a que los partidos promuevan sus ideologías de status es lo que detendría que para las elecciones del 2024 estos candidatos independientes tengan opciones de prevalecer.

“Está difícil ahora en este tiempo, porque han aparecido los partidos estos”, sostuvo el exalcalde de 87 años a Primera Hora.

Para Ortiz, las personas que tienen probabilidades de prevalecer en una elección sin estar casados con una insignia política son aquellos que son reconocidos por sus obras hacia el pueblo. A modo de ejemplo, dijo que un líder como Ramón Luis Rivera Cruz, actual alcalde de Bayamón por el Partido Nuevo Progresista, no necesita una colectividad para prevalecer en unas elecciones.

“Puede correr como le dé la gana y va a salir alcalde, porque tiene una obra y nunca se le ha sido señalado por nada malo”, precisó.

Dijo que tal caso fue lo que ocurrió con José Vargas Vidot, quien se convirtió en el primer legislador en ser electo de manera independiente.

“Vargas Vidot tenía una historia con las personas humildes y los electores vieron su bien”, afirmó.

Al hacer esta descripción, Ortiz insistió que serían personas reconocidas por su trabajo hacia el pueblo las que tendrían probabilidad de prevalecer como independientes.

“Que no le quepa la menor duda, el que corra como candidato independiente tiene que ser una persona que lo conozca hasta los perros. Tiene que ser una buena persona, definitivamente”, señaló.

Santos Ortiz aceptó que fue la obra que logró realizar durante su primer cuatrienio (1984-1988) como alcalde bajo la insignia del Partido Popular Democrático (PPD) lo que lo llevó a permanecer como alcalde independiente en su segundo término (1988-1992).

Según relató, su candidatura independiente surgió porque, al año y medio de haber ganado, el PPD promovió una primaria popular en su pueblo. Enfrentó a Jorge Fas, quien es primo del expresidente del Senado, Antonio Fas Alzamora. Alegó que la competencia surgió porque, en aquel entonces, Fas Alzamora era el secretario de la Pava e impulsaba a su familiar.

Fas ganó la contienda y Ortiz firmó un documento en el que estipulaba que para esas elecciones del 1988 no habría primarias dentro del PPD. Pero, el reclamo del pueblo a Ortiz fue tal, que surgió desde todos los rincones de Cabo Rojo el movimiento que lo mantuvo en la poltrona municipal de manera independiente.

Aspirar en esas elecciones no fue fácil para el exalcalde. Tuvo que luchar en los tribunales para aparecer en lo que fue la primera papeleta amarilla municipal. Dijo que su caso llegó al Tribunal Supremo y prevaleció cinco a cuatro.

“Ganamos los tres pasos que yo pedí: que apareciera en la papeleta municipal como candidato en la cuarta columna, con una asamblea que yo pedía. Todos mis asambleístas eran populares con excepción de uno o dos. Al Supremo darme la razón, por ahí se hizo viable la candidatura”, expresó.

Recordó que como candidato independiente pasó por el desprecio del liderato popular. Expuso que exlegislador Severo Colberg acudió a un mitin político y le pidió a los cabarrojeños que lo mandaran para el “carajo”.

“Para qué fue eso… Tuvo que salirse de allí”, expuso, al rememorar que lo que ocurrió fue el malestar del pueblo.

Gracias al exalcalde de Ponce, Rafael “Churumba” Cordero, Ortiz pudo permanecer como miembro de la Asociación de Alcaldes, que agrupa a los populares. Este le llevó a una reunión en La Fortaleza con el entonces gobernador Rafael Hernández Colón, al que le llevó 100 habanos como señal para “fumar la pipa de la paz”. Su acto representó su reentrada al PPD, relató Ortiz.