A casi cuatro meses del contrato de privatización de la transmisión y distribución de energía eléctrica en el País, el presidente y principal ejecutivo de LUMA Energy, Wayne Stensby no pudo precisar hoy cuándo cesarían las interrupciones en el servicio eléctrico y dijo que la restauración del sistema tomaría por lo menos una década de “trabajo duro”.

No soltó prenda en cuanto al número de celadores que tiene en funciones la compañía para hacer frente a los frecuentes apagones, amparándose en que la información es parte una demanda que entabló en contra de la empresa, la Cámara de Representantes.

Sensby dijo que la reducción en las interrupciones en el servicio no se puede medir en días, meses y ni siquiera en años.

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“El sistema está sumamente frágil y va a tomar mucho tiempo traerlo al estado en el que debería estar”, sostuvo el empresario en una conferencia de prensa en la que estuvo disponible para contestar preguntas de los medios de comunicación a través de la plataforma digital TEAMS. Dijo que el sistema eléctrico de Puerto Rico “es el peor de Norteamérica”.

Dijo que los clientes “van a comenzar a ver mejoras al sistema a lo largo del tiempo” y reiteró que hasta que no se estabilice el área de generación, las mejoras que pueda hacerle LUMA a la red de transmisión y distribución, seguirá dependiendo de la capacidad de las plantas generadoras de producir la electricidad necesaria para cumplir con la demanda. Insistió en que las plantas generadoras de la AEE “están obsoletas”.

Para atender las interrupciones en el servicio, Stensby detalló que LUMA da prioridad a hospitales, la Policía y Bomberos y después a las que impacten a un número grande de consumidores. Luego dijo, atienden las que están afectando hogares o negocios particulares o grupos más pequeños de consumidores

“Quizás esto sea distinto a lo que PREPA (la AEE) acostumbraba a hacer, sin embargo, es un enfoque estándar y asegura que cada cliente en Puerto Rico tenga voz. LUMA ya no es a quién conoces o quién tiene influencia. Ponemos a todos los clientes primero”, reclamó Stensby.

Alegó que ha circulado “mala información” acerca de la empresa y sostuvo que LUMA Energy ofrece servicios a sus clientes 24/7 y que tiene brigadas que trabajan los fines de semana.

Reclamó también que LUMA ha cumplido con el contrato para la transmisión y distribución de la energía eléctrica, que suscribió con la Autoridad de Energía Electrica (AEE) el pasado primero de junio de $105 millones a un término de 15 años. “Hemos cumplido con todos los requisitos contractuales”, indicó.

“El gobierno de Puerto Rico no le dio nada a LUMA. Lo que hizo fue pasar una ley para transformar el sistema eléctrico y a partir de esa ley se llevó a cabo un proceso competitivo en el que LUMA participó”, sostuvo para agregar que en el proceso de licitación la empresa “fue capaz de demostrar que tenía la mejor propuesta”. Sostuvo que el proceso fue avalado por el Comité de Alianzas Público Privadas, la Junta de Gobierno de la AEE y la Junta de Supervisión Fiscal (JSF).

Stensby dijo que LUMA tiene unos 3 mil empleados, pero cuándo se le preguntó en específico por el número de celadores, indicó que ninguna empresa revela los nombres, direcciones y salarios de sus empleados.

Alegó que la investigación que conduce la Comisión de Energía de la Cámara de Representantes sobre el alance del contrato y movilidad de empleados de la AEE a agencias del gobierno “tiene la intención de continuar hostigando públicamente a los empleados de LUMA

Sobre el problema de falta de facturación a unos 40 mil clientes el pasado mes de agosto, dijo que no tenía detalles, pero indicó que se han hecho “unas correcciones” y que a esos abonados ya se les está facturando por el servicio.

Preguntado si LUMA tomaría alguna medida en el futuro para lidiar con las fluctuaciones en la compra de combustible, que redundan en aumentos tarifarios, Stensby dijo que ese renglón no es responsabilidad de LUMA. “Cualquier estrategia de precios descansa sobre la AEE”, sostuvo.

“A pesar de los retos estamos trabajando duro para poner la energía confiable y asequible que todos quieren”, sostuvo Stensby.

Dijo que proyectan trabajar en 65 proyectos sufragados con fondos federales asignados por FEMA, con una inversión de $2,088 millones. Detalló que estos son: 23 trabajos en el área de transmisión; 23 en el área de distribución y 15 en subestaciones, que incluyen obras en las subestaciones de Cataño, Vieques y Culebra.

Luis Raúl Torres: “Lo seguiremos fiscalizando”

Por su parte, el representante Luis Raúl Torres Cruz, quien preside la Comisión de Enegía de la Cámara sostuvo que el 3 de agosto el Tribunal Supremo le ordenó a LUMA Energy entregar la información que se le ha pedido desde la Legislatura y el 8 de septiembre, el tribunal le denegó a la empresa el pedido de reconsideración.

“Parece que el señor Stensby entiende que él está por encima de la Ley, de nuestra Constitución, de la Asamblea Legislativa, de los Tribunales, del Gobernador, que ha dicho que Puerto Rico es un país de Ley y orden y peor aún, cree que está por encima de la voluntad de nuestro pueblo”, dijo Torres Cruz.

“¡Ese es el Presidente de LUMA Energy a quien el gobernador Pedro Pierluisi Urrutia defiende a costa del sacrificio de nuestra gente!”, sostuvo para agregar que seguirá fiscalizando el contrato. El legislador popular indicó que el contrato de $105 millones se puede ampliar hasta $125, sujeto al cumplimiento de una métricas. Según Torres Cruz la empresa opera mediante un contrato suplementario de $115 millones a18 meses, sujeto al proceso de quiebra de la AEE.