Luego de culminados los trabajos en la Cámara de Representantes, María Elena Lara, presidenta de la Federación de Maestros, se encontró con los manifestantes que se mantuvieron afuera desde temprano en el día.

 En declaraciones a la prensa, Lara señaló que estaban sumamente indignados por el largo proceso que culminó con la aprobación de la reforma al Sistema de Retiro de Maestros.

"Así no se legisla, a altas horas de la noche. Sometiéndonos a hambre, ni siquiera al baño nos dejaban ir, ni a beber agua. Hubo que pelearlo para venir aquí con este atropello. Nos sentimos sumamente indignados y les decimos a esos legisladores que ellos tienen que darle la cara a los maestros en sus pueblos", declaró.

La dirigente magisterial expuso que el próximo paso es regresar el lunes al Senado y añadió que la huelga no está descartada.

A preguntas de la prensa, señaló que el atraso en la aprobación se debió a que no tenían los votos y tuvieron que "ir torciendo brazos".

 "Entendemos que le torcieron al brazo a Brenda López de Arrarás, a Luis Vega Ramos, a los que dijeron que nos iban a apoyar. A Luis Raúl Torres también", sostuvo la líder magisterial.

Las expresiones de Lara se realizaron mientras un grupo de maestros exigió la salida de los efectivos de la Policía, antes de abandonar el Capitolio. Un grupo de educadores, se sentó en las escalinatas del lado norte, solicitando la salida de las decenas de policías que se apostaron frente a la Casa de las Leyes.

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