Millonarias mejoras a la carretera PR-10 fueron anunciadas este martes por el gobernador Pedro Pierluisi, incluyendo el que para verano próximo iniciaría el proyecto de construcción del tramo que falta entre Utuado y Adjuntas para lograr que esta importante vía finalmente una al norte con el sur.

Según anunció en una conferencia de prensa realizada en un tramo de la carretera en Utuado, recientemente el Departamento de la Vivienda federal (HUD, por sus siglas en inglés) aprobó asignar $550 millones para lograr completar este expreso entre Arecibo y Ponce.

“El Departamento de Vivienda Federal autorizó que utilicemos fondos del programa CDBG-MIT (Community Development Block Grant Mitigation), de Mitigación, para culminar esa gran carretera que va a unir a Arecibo y Ponce. La PR-10 es un importante conector de norte a sur en nuestra Isla, de la cual ya más de tres cuartas partes está construida y en uso. La porción restante se encuentra entre los pueblos de Utuado y Adjuntas y tiene, aproximadamente, 7.6 kilómetros de distancia que se dividen en cuatro tramos e incluyen la construcción de 20 puentes en esta zona montañosa. Por eso es que el costo es tan alto, $550 millones lo que estimamos que eso va a costar”, informó.

El proyecto ya está en la etapa de solicitud de propuestas para lograr seleccionar a la firma de construcción que se haría cargo de esta obra prioritaria para la administración Pierluisi.

El estimado que dio el director de la Autoridad de Carreteras y Transportación (ACT), Edwin González, es que se prevé que “para verano del año que viene estar poniendo aquí la primera piedra de la extensión del proyecto prioritario del señor gobernador y que para, entonces, ya tener encaminado también todo lo que es el mantenimiento de la PR-10″.

Ese mantenimiento del que habló incluiría la pintura del pavimento, señalización y la colocación de ojos de gato, los cuales en la noche ayudan a observar los límites de los carriles. En cambio, no se prevé la colocación de luminarias, aceptó González.

Entretanto, el gobernador destacó que esta vía lleva sin terminarse unos 20 años.

“La razón por la cual Vivienda (federal) accedió a financiar esa obra, que es de Carreteras, que normalmente es la Administración de Carretera la que financia ese tipo de obra, es que esto en inglés se le considera un ‘lifeline’. Es decir, cuando hay huracanes en Puerto Rico, hay comunidades aquí que quedan prácticamente aisladas y es bien difícil accesarlas, precisamente, porque la vía actual está llena de curvas, toma mucho más tiempo transitar por ella, y puede tornarse peligrosa cuando hay un huracán y luego del paso del huracán. Al tener construida la extensión, le va a dar más seguridad, más conectividad, a todos estos pueblos, desde Arecibo hasta Ponce y, particularmente, pues, la gente que reside en el área de Utuado y Adjuntas”, manifestó el primer ejecutivo.

Además de la culminación de la carretera PR-10, el gobernador anunció el inicio de una obra para mitigar derrumbes en un tramo entre los kilómetros 41.6 y 47.5 de la mencionada vía en Utuado. La misma tendrá un costo de $78.9 millones.

La construcción, que demorará dos años, incluye la edificación de cuatro puentes, entre ellos, un puente de 36 metros de largo en el kilómetro 41.9 y tres puentes adicionales entre los kilómetros 44.7 y 45.2. También habría reparación de deslizamientos con la construcción de estructuras de tierra reforzada, muros de gaviones, “soil nailing walls” y muros en hormigón; mejoras a los sistemas de drenaje; fresado de asfalto existente, asfalto de superficie, marcado de pavimento, instalación de ojos de gato y 2,045 metros de barreras de seguridad, entre otros trabajos suplementarios.

“La condición de nuestros puentes y carreteras tiene un impacto directo en la calidad de vida del pueblo de Puerto Rico, por lo que todas y todos tienen mi compromiso de seguir trabajando con nuestras comunidades para asegurar estos proyectos se trabajen con prioridad para garantizar accesos adecuados a todas las comunidades. De la misma manera, vamos a continuar identificando fondos para, no solo continuar con las mejoras a toda nuestra infraestructura vial, sino darle el mantenimiento adecuado, para que sean seguros”, sostuvo el gobernador, al indicar que estas obras son por derrumbes ocasionados tras los huracanes Maria e Irma en el 2017.

Por otro lado, en medio de estos anuncios, el alcalde de Utuado, Jorge Pérez, solicitó públicamente a la Agencia federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, en inglés) que extienda por 180 días la exigencia de que le sometan los informes sobre los gastos incurridos por los daños del huracán Fiona. Dijo que las continuas lluvias e incidencias registradas en su pueblo no le han dado tregua como para sumirse a someter todos los documentos y lograr los reembolsos de los daños.

El gobernador, de inmediato, reconoció la necesidad de conceder tiempo adicional a los municipios para someter los documentos. Por ello, adelantó que estarían solicitando una nueva extensión de tiempo.