La Junta Universitaria de la Universidad de Puerto Rico reclamó a la Junta de Supervisión Fiscal el cumplimiento de la Ley Núm. 92 del 2024, que asigna un presupuesto operacional de $500 millones al sistema universitario.

Según se indicó mediante comunicado de prensa, el incumplimiento de esta Ley redujo $59 millones del presupuesto asignado a la institución que corresponden para este año fiscal 2024-2025.

El organismo universitario, compuesto por representación estudiantil, claustral y administrativa, expuso en comunicado de prensa que la “Ley para Ponerle Fin a la Quiebra de Puerto Rico”, también conocida como Ley Núm. 53 de 26 de octubre de 2021, dispuso una aportación total a la Universidad de Puerto Rico (UPR) de $500 millones.

“Sin embargo, la interpretación de la Junta de Supervisión y Administración Financiera (JSAF) fue que solo $441 millones se destinarían a la gestión operacional de la institución y los $59 millones restantes para uso restricto para resoluciones conjuntas o asignaciones especiales tales como: servicios de salud que se brindan al país a través de internos y médicos residentes, la Red Sísmica de Puerto Rico, adiestramientos a empleados públicos, adiestramientos a maestros y directores escolares del Departamento de Educación de Puerto Rico, entre otros”, dicta el comunicado.

Destacaron que, en mayo de 2024, tanto la Junta de Gobierno como la Administración de la UPR, impulsaron en la Legislatura el Proyecto de la Cámara 2002, a los fines de aclarar la intención del Artículo 105 de la Ley Núm. 53 de 2021 y establecer que serán $500 millones para la operación del sistema universitario. En junio pasado, el gobernador Pedro Pierluisi firmó el proyecto legislativo que se convirtió en la Ley Núm. 92 del 2024.

“Sin embargo y pese a este gran esfuerzo universitario, la Junta de Supervisión y Administración Financiera, ambos Cuerpos Legislativos, la Oficina de Gerencia y Presupuesto (OGP), hicieron caso omiso de esta Ley asignando nuevamente $441 millones provenientes del Fondo General, limitando una vez más el presupuesto operacional del principal centro docente del país”, detalla el escrito.

La UPR necesita esos fondos para poder mantener un presupuesto operacional balanceado, incluyendo atender proyectos críticos de mantenimiento diferido como resultado de los recortes que ya ha sufrido la institución en su presupuesto y realizar la aportación patronal al sistema de retiro de la UPR. Por otro lado, la UPR a pesar de los recortes que ha sufrido ha mantenido su responsabilidad fiscal, manteniendo una operación presupuestaria balanceada incluyendo mantener al día el pago de su deuda pública la cual asciende a menos de $300 millones. El no asignar al menos los $500 millones al presupuesto de la UPR este año ocasiona un déficit estructural de alrededor de $63 millones en la UPR. Pero no se puede perder de perspectiva que aún con los $500 millones garantizados, el mantener una operación óptima es todo un reto, cuando se toma en cuenta el aumento inflacionario continuo en cosas claves como las utilidades, y la necesidad de que haya justicia salarial para los empleados”, dijo el doctor Miguel Vélez Rubio, Rector del Recinto de Bayamón.

Por su parte el doctor Rafael Méndez Tejeda, representante de los claustrales en la Junta Universitaria de UPR dijo que, “es necesario rescatar la institución del panorama tétrico al que ha sido sometida durante los últimos años como consecuencia de los recortes masivos y aumentos desmedidos. Llegó el momento de invertir en el futuro defendiendo el presente: la Universidad de Puerto Rico. Exigimos que la Junta Fiscal, la Asamblea Legislativa y la OGP vayan más allá de pronunciamientos vacíos y palabras bonitas y con sus acciones de cumplimiento con la Ley 92 del 2024 validen sus expresiones sobre la importancia para el futuro desarrollo del país devolviendo a la UPR los $59 millones recortados al presupuesto que recién aprobaron. Llegó el momento de invertir en el futuro defendiendo el presente: la Universidad de Puerto Rico”.

La Junta Universitaria aseguró que, a raíz de los recortes, la Universidad de Puerto Rico, durante el pasado año fiscal, vivió un escenario con efectos nefastos para la infraestructura, el reclutamiento de personal de apoyo al servicio estudiantil y de apoyo al sistema operacional de la institución.

“Estamos convencidos que la UPR ha aportado en el desarrollo cultural, educativo y socioeconómico de manera consistente e ininterrumpida al pueblo puertorriqueño por más de 120 años. Es momento de reivindicar su rumbo y proponer acciones afirmativas que redunden en el cumplimiento cabal de la misión de nuestra adorada alma máter”, expresó Sebastián Segarra, representante estudiantil.