Pedro Pierluisi firma nueva orden ejecutiva para contener los contagios de COVID-19
Ya no se pedirá una certificación jurada a las personas que no se vacunen, con excepción del sistema educativo y de salud.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 3 años.
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El gobernador Pedro Pierluisi firmó este lunes una nueva orden ejecutiva para contener los contagios de COVID-19 en Puerto Rico, justo en el momento en que se percibe un leve repunte de casos en la isla, con una concentración particular en el área metropolitana.
Las nuevas disposiciones principales incluyen medidas para ordenar la vacunación a menores de 5 a 11 años y determinar sus limitaciones en actividades multitudinarias, la vacunación obligatoria para patronos con 50 empleados o más, así como la eliminación del requisito de una certificación jurada para excepción religiosa y la presentación de prueba negativa el primer día de jornada laboral para las personas no vacunadas, que ahora se presentarán cada siete días. La eliminación del pedido de las certificaciones por razones religiosas o médicas excluyen a las personas vinculadas a los sectores de Salud y Educación.
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“En aras de evitar aumentos significativos y ante las festividades que se aproximan, es necesario mantener ciertas medidas e incluir otras acciones afirmativas en sectores más vulnerables para así mantener las bajas tendencias que nos han hecho ser un ejemplo para otras jurisdicciones”, dijo Pierluisi.
Como parte de la nueva orden ejecutiva y como medida cautelar, se mantiene el uso de mascarilla en actividades con 50 personas o más al aire libre y se recomienda en lugares turísticos y en áreas urbanas donde haya aglomeraciones. Este requisito de mascarilla no incluye playas ni balnearios. La orden entra en vigor hoy, 15 de noviembre, y busca agrupar todas las disposiciones vigentes y añadirá otras para atender la emergencia contra el novel coronavirus y sus variantes.
El Departamento de Salud también podrá exigir el uso de mascarillas en escenarios donde lo determine adecuado. Por el momento, se mantiene la exigencia de uso de mascarilla en lugares cerrados. Para reuniones privadas de 20 personas o menos, en las cuales todos están vacunados, la mascarilla se recomienda pero no será obligatoria.
En cuanto a actividades multitudinarias en lugares cerrados, se mantiene que todas las personas deberán estar vacunadas para que el establecimiento tenga un 100% de ocupación; para los establecimientos que soliciten la prueba negativa, el aforo se limitará al 50% de ocupación.
Se informó que los requisitos de estar vacunado o presentar un resultado negativo contra el COVID aplicarán a los menores entre 5 a 11 años desde el 1 de febrero, a partir de la vigencia de la orden ejecutiva. Esto incluye visitas a restaurantes, hoteles y otros establecimientos.
Además, ahora los menores entre 5 a 11 años podrán asistir a eventos multitudinarios en lugares cerrados hasta el 31 de enero de 2022 con un resultado de prueba negativa de COVID-19 realizada 72 horas antes de acceder al establecimiento. “A partir del 1 de febrero estos menores se regirán por las disposiciones que aplican a los adultos”, advirtió el Primer Ejecutivo, al agregar que las disposiciones no aplican a los menores de 5 años, quienes no podrán asistir a estos eventos salvo por una dispensa del Departamento de Salud.
De otra parte, en el área de Educación, se especificó que el mandato de vacunación para tomar clases presenciales continuará vigente y se extenderá a los alumnos entre 5 a 11 años, quienes deben estar vacunados en o antes del 31 de enero de 2022. Este mandato ya era efectivo a través de una orden administrativa firmada el pasado mes de julio por el secretario de Salud, Carlos Mellado, y se extiende a los universitarios. Se aclaró que los estudiantes con excepciones religiosas o médicas pueden estar de forma presencial, pero de no estar vacunados ni tener excepción, sólo podrán recibir educación virtual u otro método alterno.
“Queremos evitar por todos los medios la exposición cuando hay de por medio una educación presencial”, dijo Pierluisi.
Asimismo se explicó que en los eventos en lugares abiertos, con 500 personas o más, será compulsoria el uso de mascarillas y los organizadores deben coordinar los protocolos con Salud.
En cuanto a los empleados públicos o contratistas, el gobernador fue preciso en informar que ahora se incluirán a los que laboran en los municipios en el mandato de vacunación. Estos tendrán 45 días para cumplir con la inoculación completa.
Sin embargo, se aclaró que desde hoy no se exigirá las certificaciones o excepciones médicas o religiosas, con excepción de las personas vinculadas al sector educativo y de salud.
“Una de dos: o vienes vacunado o una vez a la semana das tu prueba negativa de COVID o presentas prueba de que estás recuperado del COVID”, acotó Pierluisi respecto a las opciones del resto de los empleados públicos.
Insistió en que la ciudadanía debe comprender que aún hay una emergencia por pandemia activa y que la mejor opción de prevención contra el virus es la vacunación.
“Este virus está para quedarse y pueden aumentar los casos y pueden venir nuevas variantes... pero la solución sigue siendo la misma y es la vacunación. En la medida que más personas se vacunen y refuercen su vacunación, aunque aumenten los casos, tendremos menos hospitalizaciones y menos fallecimientos... pero este es un virus que está para quedarse y nadie puede pensar que de buenas a primeras va a desaparecer”, manifestó el gobernador.
Por su parte, el secretario de Salud instó a la ciudadanía a acudir a los centros de vacunación para procurar la dosis de refuerzo. En Puerto Rico hay más de un millón de personas que ya necesitan ponerse la dosis adicional para aumentar su capacidad de inmunidad al virus. Se estipuló que, actualmente, unas 395,000 personas han recibido el refuerzo.
Según los datos de la agencia sanitaria , la tasa de positividad del virus para el lunes estaba en 3.1%, una cifra porcentual que ha subido sostenidamente desde el 31 de octubre cuando estaba en 1.8%.
De otra parte, a menos de dos semanas de la celebración del Día de Acción de Gracias se confirma que el leve alza en casos se desarrolla, particularmente, en pueblos de la región metropolitana, afectando con mayor capacidad a los grupos de personas de 30 a 49 años y a la población pediátrica de 0 a 4 años de edad.
Aunque la transmisión comunitaria en la isla se mantiene en un nivel moderado (amarillo), el Departamento de Salud monitorea 94 brotes activos, en su mayoría generados en ambientes familiares.