Muy tarde para subsanar su imagen.

La experta en relaciones Uka Green expresó que la intención de limpiar la imagen del gobernador Ricardo Rosselló tras el escándalo originado por el chat de 889 páginas de Telegram en el que tanto él como varios asesores manifestaron comentarios machistas, homofóbicos y de burla hacia políticos, artistas y otros ciudadanos, está difícil.

 “Es un problema de credibilidad bien grande, y un problema de credibilidad grave sustentado en unos hechos que son contundentes, porque no es que no le creamos, es que hay un chat que ha implosionado al gobierno, ha implosionado su círculo más cercano. Es un problema de credibilidad basado en sus propias acciones”, observó la publicista con sobre dos décadas de experiencia en el campo.

“Creo que ya es tarde, y creo que como único él puede subsanar su puertorriqueñidad o su deseo de servirle al país es dejando ese puesto para el cual fue electo, y para el cual la mayoría de la gente no lo quiere”, analizó la estratega en comunicaciones.

“Creo que no puedes aferrarte a una silla para dirigir un país que no quiere que tú lo dirijas, y que no te va a creer y no va a confiar, y que está indignado, molesto y dolido”, reiteró.

Al hablar sobre los diversos intentos de perdón del primer mandatario, fue insistente en la imagen lacerada por la falta de credibilidad.

Entre las acciones recientes, trascendió que Rosselló fue a Lares hace unos días para disculparse con Wilfredo Santiago, una de las personas de las que se burló en el señalado chat por su obesidad. La visita fue confirmada a El Nuevo Día por el secretario de Asuntos Públicos de La Fortaleza, Anthony Maceira.

“Pienso que en tanto y en cuanto se permite que se capte esa imagen, ya sea por su equipo de comunicaciones o por cualquier otra persona que esté en ese momento, el acto que el intenta hacer de perdón, pierde credibilidad y pierde el sentido de que sea genuino”, señaló la también autora.

A su vez, no ve el acto como una doble victimización en vista de que “independientemente de que sea una estrategia o no, cada cual está en su derecho de recibirlo y aceptar su perdón”. Uka Green agregó que “la victimización fue cuando lo incluyeron en el chat. No creo que ahora lo estén victimizando. Creo que lo están utilizando para comunicar que él (Ricardo Rosselló) está intentando enmendar las cosas por las cosas que se le está recriminando”.

En cuanto al manejo de la crisis a nivel de imagen, la comunicadora observó que “esos segundos de perdón que pidió (en la primera conferencia de prensa) no contaron con credibilidad alguna. No logró transmitir lo que él pretendía transmitir. Si a eso le añades el manejo de esa conferencia de prensa, si a eso le sumas el hecho de haber ido a una iglesia, haber estado a 40 y pico de minutos y haber permitido que se grabara, porque si tú quieres pedir perdón, quieres buscar de Dios o cualquier religión, tú lo haces en privado… Pero creo que este fue un acto de desesperación”. En este sentido, analizó que como estrategia para su equipo de comunicaciones, “no está funcionando porque el pueblo no le está recibiendo bien”.