Confiado en que les hará justicia a las víctimas del crimen y a sus familias, el gobernador Luis Fortuño convirtió ayer en ley cuatro medidas que, aseguró, le dan más garras a nuestro sistema judicial.

Las piezas, tres de éstas radicadas por el Ejecutivo, harán que el proceso de búsqueda de justicia y sanación de la víctima y su núcleo familiar sea más ágil y efectivo, dijo el Primer Ejecutivo.

“Seguimos fortaleciendo nuestros esfuerzos para asegurarnos de que los criminales no quedarán impunes... permitirán tramitar más ágil y efectivamente su convicción y proteger a nuestras comunidades”, señaló.

Dos de las medidas permitirán, respectivamente, la revocación automática de la libertad bajo fianza a individuos que violen sus condiciones y el arresto inmediato de aquellos convictos que no cumplan con los parámetros establecidos para ese privilegio.

Respecto a este último punto, el Gobernador sostuvo que en el año fiscal 2010-2011 643 confinados libres bajo probatoria cometieron delitos nuevamente o violaron sus condiciones de libertad en probatoria.


“Entiendan que, de ahora en adelante, hay unas repercusiones bien serias si no cumplen a cabalidad con las condiciones”, sentenció.

Las otras dos, de forma independiente, permiten establecer salas especializadas para casos de asesinatos y que el procedimiento judicial sea ágil y justo, tanto para la víctima como para el imputado. “Justicia tardía no es justicia y conocemos la cantidad de casos en que se siguen alargando y atrasando con distintas artimañas de parte de abogados de defensa... y esto se tiene que acabar”, sentenció Fortuño, quien dijo que los abogados de defensa son un grupo “muy poderoso”.