La Asociación de Maestros de Puerto Rico (AMPR), con el apoyo de la American Federation of Teachers (AFT), pidió información a la secretaria de Educación, Julia Keleher, sobre el proceso en curso para convertir escuelas públicas en escuelas chárter.

Según la presidenta de la Asociación, Aida Díaz, continúan recibiendo consultas de maestros y padres que solicitan asistencia luego de enterarse de manera informal que sus escuelas pasarán a ese sistema.

“Al día de hoy, no hemos visto una declaración oficial del Departamento de Educación sobre el proceso en curso que se está llevando a cabo. Esta falta de transparencia y acceso a la información contribuye a crear un clima de incertidumbre que luego podría fomentar la pérdida de estudiantes en el sistema y un éxodo de talento profesional”, dijo Díaz en declaraciones escritas.

En la carta, la Asociación destacó que el Departamento no está cumpliendo con los requisitos de transparencia establecidos en la Ley 85-2018. “A pesar de la regulación que exige que las entidades realicen consultas con la comunidad, estas consultas no se han llevado a cabo en las escuelas que se anuncian como escuelas públicas alianza”, afirmó Díaz en el comunicado.

“La decisión de la secretaria de Educación de convertir cerca de 30 escuelas públicas tradicionales en escuelas chárter, sin consultar a padres, maestros y comunidades, y sin mediar transparencia alguna, es un desafío a la ley y socavará aún más el sistema de educación pública que ya adolece de una grave deficiencia fiscal,” dijo por su parte la Presidenta de la AFT, Randi Weingarten.

“¿Quiénes son los operadores que la secretaria ha designado para hacerse cargo de las escuelas? ¿Qué harán los padres si quieren mantener a sus hijos en la escuela de la comunidad que se convierta en chárter durante este proceso? ¿Qué recursos tienen los padres si un operador saca el dinero del salón de clases para llenar sus bolsillos? ¿Los padres o educadores tendrán voz en el proceso de conversión? ¿Qué pasará con los maestros que quieren enseñar en la escuela de su comunidad? Estas y otras preguntas son las que precisamente Keleher tiene la obligación de responder. Este es un sistema de escuelas públicas, no privadas. Ya es hora de que le ofrezca al pueblo un informe completo de todas sus acciones, las cuales, hasta la fecha, han estado ocultas en secreto y en claro desafío de la ley”, añadió.

Weingarten además dijo que “también le recomendamos a la Secretaria que analice detenidamente los resultados de las chárter en los Estados Unidos continentales, donde los méritos de ese movimiento ha ido en picada y sus resultados se han quedado cortos. Esa es la realidad en lugares como Ohio, donde los operadores de chárter han saqueado cientos de millones de dólares de las escuelas públicas. También es la realidad en Los Ángeles, donde los maestros se declararon en huelga el mes pasado porque se sacaron cientos de millones de dólares de las escuelas públicas para financiar las chárter, lo que llevó a que las escuelas no tuvieran enfermeras, consejeros, bibliotecarios y profesionales de salud mental.  La NAACP ha examinado de cerca los daños y los resultados desiguales relacionados con las escuelas chárter y también pidió una moratoria”.

“Según una encuesta de un rotativo local, solo el 18 por ciento de los votantes en Puerto Rico apoyan que las escuelas públicas se conviertan en chárter. Sin embargo, Keleher ignora el vasto sentimiento público que se opone fuertemente a sus acciones.  Es hora de que Keleher ponga los intereses de los padres, estudiantes y maestros por encima de los operadores de chárter, y ponga en pausa su implementación”, concluyó Weingarten.