Lo que desencadenó el rechazo de la CEE en extender el registro electoral
El PIP solicitó una extensión hasta el 6 de octubre, mientras que el PPD de tres días.
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El comisionado electoral por el Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), Roberto Iván Aponte, denunció que el rechazo de la presidenta de la Comisión Estatal de Elecciones (CEE), Jessika Padilla Rivera, en extender la fecha del registro electoral al 6 de octubre principalmente afectará a la juventud, quienes ejercerían su derecho al voto por primera vez en los comicios generales de noviembre.
“Eso es lo que está ocurriendo ahora mismo: miles de jóvenes que tienen un derecho constitucional a inscribirse, porque cumplen 18 años en o antes del día de las elecciones, y a votar y la Comisión, de una de las razones de ser principales es inscribir seres humanos puertorriqueños, no cumplió con ese rol y para nosotros eso es una prioridad”, subrayó a Primera Hora.
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“Irrespectivamente del partido político, a quien afecta es a cada joven que cumple con los requisitos de ser un elector y no se le va a permitir inscribirse. A mí me parece que eso es increíble, cuando (son) el presente y el futuro de nuestro país”, continuó.
Fue el domingo, 15 de septiembre que Aponte le solicitó a Padilla Rivera una extensión de 15 días, petición avalada por el Movimiento Victoria Ciudadana (MVC) luego de algunos reclamos de personas que han sufrido lentitud de las transacciones del registro, solicitudes que fueron erróneamente rechazadas por el Registro Electrónico de Electores (eRe) y el cierre de varias localidades de la Junta de Inscripción Permanente (JIP).
Acorde a su propuesta, la fecha límite para registrarse se ajustaría al 6 de octubre, en lugar del 21 de septiembre hasta las 8:00 p.m.; es decir, 30 días antes de la celebración de las elecciones generales, que serán el 5 de noviembre.
La presidenta de la Comisión, sin embargo, opuso esta propuesta, señalando en entrevista radial supuestos “riesgos” que podrían afectar la impresión de las papeletas, preparación de los maletines, grabación de las tarjetas de memoria, el embalaje del sobre adelantado y el ausente, así como la preparación de las listas de votación físicas y electrónicas.
“Es otro golpe más al pueblo puertorriqueño. Un reclamo de los ciudadanos de extender la fecha del cierre de registro ha sido rechazado por el PNP, Partido Popular y por la presidenta, quien debería representar el interés público”, reiteró Aponte.
¿Estrategia política?
Esto no tenía que suceder, refutó a este diario la comisionada electoral por el Partido Popular Democrático (PPD), Karla Angleró González.
A diferencia del Partido Nuevo Progresista (PNP), la licenciada recordó que su partido “no rechazó” una extensión del periodo de inscripción electoral, sino que sugirió que el aplazamiento se limitara a tres días “de manera que no se afectara el calendario electoral”, que exige la creación del índice de las listas de los electores, la división por unidad de lista los electores, la impresión de lista de electores y la impresión de papeletas, entre otros materiales necesarios, antes del día de las elecciones generales.
Su propuesta, repitió, fue rechazada por el PIP, aferrándose en que se extendiera hasta el 6 de octubre.
“La Comisión había hace un tiempo aprobado que, luego del 21 (de septiembre), se establecía una semana adicional para un cierre administrativo. ¿Qué se hace en ese cierre administrativo? Se trabaja absolutamente todas las transacciones que estén pendientes, las inclusiones, las exclusiones para tener el registro lo más certero posible. Así que, yo lo que presenté como alternativa era que se extendiera tres días adicionales, entiéndase domingo- que la mayoría de las personas están libres- lunes y martes en turnos de 12 horas con turnos de empleados rotativos para que nunca se quede una Junta de Inscripción sin poder atender a nadie. Así no se alteraba el calendario electoral”, detalló.
“Nosotros tenemos que ser responsables, porque nosotros no solamente respondemos por capricho de una fecha. Nosotros tenemos un calendario electoral y tenemos que asegurarnos que el evento salga”, reiteró.
Y este no fue el único roce que Angleró González señaló con el PIP. Mencionó también que les había pedido a los demás comisionados electorales “movilizar personal para crear juntas adicionales en lo que es control de calidad” ya que hay “69,000 transacciones pendientes”. Esto tampoco fue apoyado ni evaluado, particularmente por el PIP.
“Es una terquedad sin abrirte, sin evaluar responsablemente el efecto cadena que esto puede tener. El Partido Popular está consciente de todos los retos del eRe, del cierre de las Juntas de Inscripciones Permanentes- cómo incidió en el acceso al elector- pero, también, está bien consciente de que el evento, por decreto constitucional, se lleva a cabo el 5 de noviembre”, sostuvo.
Para Angleró González, alegó que esto se trata de una “estrategia clara” del PIP que busca apelar a la sensibilidad de los electores.
“Yo tengo mucho respeto por él (Aponte), es una persona muy inteligente, pero que él de golpe y porrazo no estuviera disponible a analizar todas las alternativas que tenemos en la mesa (es parte de una estrategia)”, estimó.
“Uno tiene que ser responsable con las alternativas que presenta ante la Comisión. No es simplemente tener unas ideas populistas porque se oye bueno al oído al que los escucha. Es que sean ejecutables”, agregó.
¿Y ahora qué?
En algo Aponte y Angleró González sí coincidieron: el diseño del Código Electoral, que eliminó las visitas a las escuelas y universidades, afectó grandemente el acceso del elector, pues se suma a que ya no hay una JIP en cada precinto, las cuales se regionalizaron antes de que el eRe estuviera disponible.
“El problema es que esto es un verlo venir”, aseguró Aponte.
De acuerdo a Aponte, augura que podrían surgir demandas de ciudadanos por las fallas de la CEE en asegurar el registro de todo elector, mientras que Angleró González no descartó que, con la voluntad de los cinco partidos, se podría volver a insistir en una extensión de tres días.