El gobernador interino David Bernier y la secretaria de Salud, Ana Ríus, afirmaron esta noche que las posibilidades de que el virus de ébola llegue a Puerto Rico son mínimas e insistieron en que no hay razón para alarmarse, tras la confirmación del primer caso de esta enfermedad en los Estados Unidos.

“Aunque las posibilidad de un contagio aquí son mínimas, el Departamento de Salud ha tomado las medidas pertinentes”, manifestó Bernier en conferencia de prensa conjunta con Ríus.

“No hay razón para alarmarse. Puerto Rico está preparado para cualquier eventualidad”, agregó el gobernador interino.

Ríus, mientras, explicó que desde que se conoció sobre el desarrollo de la epidemia de ébola en África Occidental, en Puerto Rico se han tomado las medidas preventivas y de readiestramiento de personal, según disposiciones de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés).

La doctora Ríus explicó que la semana próxima se completará un ciclo de “readiestramiento en el manejo de enfermedades altamente infecciosas” en el que han participado los cuerpos de emergencias médicas, incluyendo además de doctores y enfermeras, personal de medicina forense y otros profesionales de la salud.

La titular de Salud explicó que, además, cumpliendo con los protocolos del CDC se han identificado 42 unidades de aislamiento de las cuales 20 están en el Hospital Ramón Ruiz Arnau, en Bayamón, 12 en el Hospital Universitario de Adultos, siete en el Centro Médico de Río Piedras y tres en el Hospital Pediátrico. También precisó que han constatado que tienen el equipo de protección necesario para este tipo de situación de emergencia, cuya posibilidad aquí, es remota, según insistió.

“Ante el anuncio en los Estados Unidos de este primer caso de ébola (en Texas), el Departamento de Salud de Puerto Rico tuvo hoy (martes) conversaciones con el CDC. En el Departamento de Salud cerca del 90 por ciento del personal se ha ido readiestrando (para el manejo de estos casos) y la semana que viene todo el personal completará el readiestramiento”, explicó, por su parte, Bernier.

El 10% del personal que falta por tomar el readiestramiento en el que se repasan medidas de prevención, sintomatología (del ébola) y otros asuntos para el manejo de enfermedades altamente infecciosas, incluye a profesionales de la salud del Centro Médico de Mayagüez, dijo Ríus al estimar que más de 200 personas han sido recién readiestradas.

Bernier destacó, por otro lado, que en Puerto Rico “no hay conexión aérea directa con destinos donde se desarrolla la epidemia” y observó que el riesgo mayor ante esta situación surge con viajeros que han estado en lugares como Liberia, Sierra Leona, Nigeria y Lagos, en África Occidental.

La Secretaria de Salud explicó que si Estados Unidos impone medidas restrictivas para el control del ébola, las mismas aplicarían a Puerto Rico. Sin embargo, hasta el momento el CDC solo ha insistido en la revisión de protocolos y el readiestramiento de personal, que son las medidas ya tomadas por el Departamento de Salud, argumentó.

“Ciertamente tenemos que estar vigilantes a cómo transcurre la epidemia en África Occidental”, señaló Ríus, al insistir en que en estos casos la higiene es crucial, por lo que las personas deben ser proactivas en el aseo con desinfectantes y cloro.

En el caso de misioneros que tengan planes de viajar a zonas de peligro, Ríus y Bernier indicaron que estas personas deben prestar atención a las recomendaciones del CDC y a las medidas para evitar el contagio.

 En el caso del ébola, Ríus recordó que la transmisión se produce al entrar en contacto con saliva, sudor, sangre, semen o fluidos vaginales de cualquier persona con el virus o si se expone a contactos del animal que lo transmite, una especie de murciélago que habita en África Occidental.

“Tan pronto se confirmó la epidemia en África procedimos a identificar las unidades de aislamiento y examinar sus condiciones, realizamos un inventario del equipo de protección del personal de salud para el manejo de enfermedades altamente infecciosas y los readiestramientos del personal”, precisó Ríus.

Aunque recalcó que también es poco probable que en Estados Unidos pueda propagarse masivamente el ébola, a preguntas de periodistas respondió que si aquí surgiera un brote o situación de peligro extremo a una epidemia, ella, como Secretaria de Salud, asume el control de todos los hospitales.