Los legisladores del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), Denis Márquez Lebrón y Juan Dalmau Ramírez, solicitarán mediante legislación que se interpele al secretario de Salud, Lorenzo González Feliciano, para que aclare el trámite de adquisición y la realización masiva de pruebas para detectar el coronavirus, así como el rastreo de casos positivos y seguimiento a los que se curaron.

Además, interesa que les explique el plan post-orden de toque de queda y las discrepancias en las cifras en casos positivos que aceptó públicamente como parte de una pesquisa realizada por el Centro de Periodismo Investigativo (CPI).

“Aunque es importante la investigación que se está llevando a cabo sobre la fallida compra de las pruebas para detectar el virus, es importante también que el secretario de Salud se presente ante el país y la Legislatura para aclarar muchas dudas sobre información que sigue en el aire y que urge conocer”, precisó Márquez Lebrón en declaraciones escritas.

Una interpelación es un proceso legislativo que se lleva a cabo en el hemiciclo. Durante el mismo, se establecen una serie de turnos y tiempos para que los legisladores cuestionen al jefe de agencia sobre los temas incluidos en la legislación que se debe aprobar para que se realice este proceso.

El representante independentista manifestó que esta interpelación es necesaria para que le exponga al pueblo información correcta y certera de lo que acontece en la Isla a raíz de la emergencia causada por la pandemia del COVID-19. Aludió a que esta acción ayudará “a mejorar las condiciones de incertidumbre y ansiedad en las que estamos viviendo todas y todos por las acciones negligentes y la falta de transparencia del gobierno”.

Por su parte, Dalmau Ramírez, quien aspira en las próximas elecciones generales al cargo de gobernador, expresó que "el gobierno siempre tiene la obligación de ser transparente, pero en estos momentos de pandemia la transparencia es la diferencia entre la vida o muerte. El secretario de Salud tiene mucho que explicarle al país y el medio de la interpelación es el idóneo para recibir respuestas. Veremos si el Senado y la Cámara están a la altura del momento histórico”.

Desde que entró en funciones el task force médico del coronavirus se ha aceptado que el sistema de vigilancia que tenía establecido Salud para informar lo que acontecía con la pandemia del coronavirus está deficiente. Este grupo y el actual secretario de Salud aludió a que el proceso mejoraría con la publicación de un dashboard.

No obstante, al pasar ya un mes y una semana de que se registró el primer caso todavía no hay disponibles cifras de personas que se han recuperado de este virus.

Además, en este proceso de publicación del nuevo sistema de vigilancia desapareció información que se daba desde un principio referentes a información precisa de los casos, como por ejemplo edad, género y región de residencia.

Pero, sobre todo, González Feliciano aceptó que en las cifras que conceden diariamente puede haber casos duplicados, pues se contabilizó la prueba rápida y la prueba molecular como si se tratase de dos individuos cuando se le realizó a una misma persona. Esta irregularidad fue detectada en la investigación realizada por el CPI.

“A raíz de un análisis estadístico, es importante aclarar que, en el informe diario de casos positivos, se registran números que pertenecen al total de pruebas reportadas, tanto pruebas moleculares como serológicas; lo que podría incluir números duplicados en la cantidad de casos totales. Nos mantenemos evaluando la data recibida y depurando la misma, por lo que haremos las aclaraciones estadísticas pertinentes para que no haya duda de cómo el comportamiento del COVID-19 está afectando a nuestra población, con el fin de que sirvan de herramientas para la toma de decisiones salubristas y de política pública, así como las medidas de protección que toma la ciudadanía. Tanto el personal del Departamento de Bioseguridad como del Departamento de Epidemiología están trabajando arduamente para clarificar los números y, responsablemente, ser actualizados”, señaló.

Asimismo, en las últimas semanas ha salido a la luz una serie de irregularidades en la compra a sobreprecio de un millón de pruebas rápidas de COVID-19 a una firma constructora, Apex General Contractors, con vínculos al Partido Nuevo Progresista en el poder.

Entre las irregularidades se destacan que había otra firma que vendía las pruebas a menos de la mitad de Apex, que una de las firmas en el contrato fue falsificada y que supuestamente la empresa nunca hizo contacto con el productor de las pruebas en Australia, Promedical.