El nuevo plan fiscal que presenta la Junta de Supervisión Fiscal trae aumentos salariales para policías, maestros y bomberos, más dinero para hospitales, el plan de salud Vital y el Negociado de Ciencias Forenses, así como más dinero para becas a estudiantes de la Universidad de Puerto Rico (UPR), entre otras novedades, reveló la directora ejecutiva de la JSF, Natalie Jaresko, al ofrecer un panorama general del importante documento. 

Este plan, afirmó Jaresko, es uno a 30 años y no a 40 años, así que no sería correcto comparar con los números ofrecidos en octubre pasado.

La razón para eso, explicó, es que se trabaja en el acuerdo de reestructuración de la deuda del Gobierno, y se logró el de Cofina, y en cualquier caso ningún acuerdo sería por más de 30 años, porque los bonos de Obligaciones Generales (GO en inglés) están limitados a 30 años, según la Constitución.

“Pronosticar por más tiempo de lo que debes es arriesgado, es poner supuestos sobre supuestos. Así que hicimos lo necesario para hacer el análisis de sostenibilidad de deuda, y no fuimos más allá”, dijo Jaresko.

Por otro lado, el plan se actualizó con cifras más recientes en múltiplese indicadores y se actualizaron los estimados de población, que bajaron ligeramente en base a la población actual, las tasas de fertilidad y la renta nacional bruta (GNP en inglés). 

Además, el Gobierno entregó cifras actualizadas de pensiones retirados, a partir de los análisis actuariales del 2016, y la cantidad de pensiones bajó. 

También el Gobierno ofreció cifras actualizadas de ingreso a Medicaid, que también bajaron ligeramente. 

“Todos esos factores se traducen en diferentes niveles de gastos, de ingresos, así que es importante tenerlos correctos, actualizados”, afirmó Jaresko. 

De igual forma, se pusieron al día los números de la JSF para el año fiscal 2018, y eso cambió los números en el macro. 

En cuanto a la reforma estructural, Jaresko comentó que el plan fue actualizado y lo principal que refleja son posposiciones en cuanto a resultados que se esperan, puesto que las reformas no se han podido implementar. 

“Se ven retrasos en la implementación de reformas que aplazan hacia el futuro el crecimiento económico que tendrías como resultado de esa reforma. En varios casos tuvimos que aplazar la fecha en la que tendrías el crecimiento porque se han tardado las reformas. La reforma de welfare to work (asistencia social por trabajo) debió ocurrir en un año, pero el Gobierno está proponiendo hacerla en cuatro años, de manera que no ves el efecto económico hasta que pasen los cuatro años. La reforma de facilidad para hacer negocios, el gobierno trabajó mucho en eso, pero los cambios en los permisos que se sugirieron no comienzan hasta el próximo año, no en este año, y eso atrasa la reforma estructural”, comentó Jaresko

Asimismo, resaltó que la reforma estructural es “probablemente la pieza más importante” dentro del plan fiscal porque “es lo que te da crecimiento para el futuro, lo que cambia cómo luce tu economía, cuán competitiva es, cuánta gente se une a la fuerza laboral, cuán preparados están para unirse a la fuerza laboral”. 

Por último, está todo el componente fiscal, donde hay muchas cosas que se mantienen, como la reducción del tamaño del gobierno, la importancia del trabajo de Principal Oficial Financiero, o las reformas de pensiones.

Sin embargo, Jaresko aclaró que sí se incluyeron cambios en algunas áreas, como resultado de haber escuchado reclamos del gobierno y ciertas agencias y sus empleados. 

Específicamente, Jaresko indicó que se destinan más recursos a la Policía para atender su situación y los reclamos que han hecho. 

Dijo que habrá un incremento de 30% en los salarios de la Policía durante los próximos dos años fiscales (15% anual), lo que equivale a unos $11,500 en ese periodo (o $5,750 cada año). 

También se entregará el segundo de tres paquetes millonarios para cubrir las viejas deudas salariales, por un monto de $122 millones. 

Además, habrá financiación completo para la aportación al Seguro Social, para todos los policías, no tan solo los de menos de 40 años. Eso son $33 millones el próximo año.

Y además habrá más dinero para equipos, radios, vehículos y otras cosas que la Policía ha dicho que necesita. 

Por otro lado, hay una inversión en la salud pública.

Hay una reducción de los ahorros que debían ocurrir en el programa Vital, para que el mismo pueda mantenerse más sostenible y estable. E

so representa un gasto adicional de $1,400 millones en cinco años. 

También se eliminó la reducción de personal de enfermería, de manera que se pueda mantener los niveles de enfermeras y enfermeros actuales.

Hay inversiones en importantes hospitales como el Centro Cardiovascular, el Centro de Cáncer, el Hospital Siquiátrico, “de manera que tengan fondos suficientes para seguir operando, para obtener sus certificaciones de Medicaid, y puedan cubrir las necesidades de la gente”. 

En Educación, dijo Jaresko, habrá más fondos “para seguir apoyando los esfuerzos de reforma educativa del gobernador”.

Habrá un aumento de salario de $500 para los maestros y directores de escuelas.

Para los estudiantes de UPR, habrá otro fondo para becas este año y cada año siguiente en el plan fiscal, de $39 millones, que representa de 5,000 a 7,000 becas completas. 

Eso es en adición a los $35 millones para becas agregados el año pasado.

“Esto va a asegurar que nadie que quiera asistir a la UPR se quede fuera por asuntos financieros”, destacó. 

También hay otros aumentos relacionados con asuntos de seguridad pública.

Los bomberos recibirán un aumento salarial de $500, así como equipo adicional.

Asimismo, hay un aumento de unos $4.5 millones para nómina del Instituto de Ciencias Forenses, así como para nuevos equipos. 

Por otro lado, Jaresko destacó “la continua disminución en los gastos por servicios profesionales” del gobierno.

Para el plan de octubre pasado contemplaba una disminución de 20% en el gasto por servicios profesionales, mientras que en este nuevo plan se eleva a 30%. 

Por último, Jaresko destacó que en este plan los ingresos están reflejados de manera diferente. 

En el pasado, aclaró, al ver los ingresos no se podía determinar cuánto se había concedido de créditos contributivos en cualquier momento dado.

Ahora, se reportan los ingresos brutos, menos los créditos contributivos usados, para ver el ingreso neto.

 “Estamos exhortando al Gobierno a poner un límite a la cantidad de créditos contributivos al año, que estimamos deba ser una cantidad cercana o menor a los $247 millones que se han otorgado en promedio durante los últimos ocho años”, afirmó.