Al reiterar la oposición de la minoría del Partido Nuevo Progresista (PNP) a que se aumente el impuesto sobre el crudo, la representante Jenniffer González descartó también este lunes que se ate la controversial propuesta de la administración de Alejandro García Padilla a la aprobación de la reforma contributiva.

Esa ha sido una de las alternativas presentadas por los representantes del Partido Popular Democrático (PPD) opuestos al proyecto -entre ellos Luis Raúl Torres- quienes entienden que cualquier carga adicional debe ir acompañada de un alivio a los contribuyentes.

“Eso también denota irresponsabilidad desde el punto de vista fiscal. ¿Cómo vas a amarrar una legislación a la vigencia de la aprobación de una reforma contributiva que ni ha sido radicada como proyecto de ley, que no se le ha hecho una vista pública, que no hay una garantía de que se vaya aprobar y que tampoco se ha modelado cuáles son los escenarios económicos?”, manifestó durante una rueda de prensa la portavoz del PNP en la Cámara de Representantes, acompañada de otros miembros de la delegación.

“Aprobar un impuesto a la crudita, parte dos, amarrando una reforma contributiva que nadie ha visto es una irresponsabilidad… Acostumbran manejar asuntos delicados de manera apresurada, sin análisis, sin estudio”, añadió la expresidenta cameral.

Según González, el repentino anuncio del gobernador de que dejaría sin efecto el plan de paralizar la Autoridad de Carreteras y Transportación (ACT) y la mayor parte del sistema de transporte colectivo respondió a las exigencias del gobierno federal, que destina fondos para gastos operacionales y mejoras en esa corporación pública, al igual que en la Autoridad Metropolitana de Autobuses y el Tren Urbano.

La portavoz de los novoprogresistas instó a Torres y a otros opositores de la medida, como los representantes Manuel Natal y Carlos Vargas Ferrer, a mantenerse firmes en su posición.

“Sé que es difícil cuando es el mismo partido, pero nosotros salimos electos bajo una insignia cada cuatro años, pero tenemos que trabajar por el pueblo de Puerto Rico”, argumentó.

González aseguró que elevar el impuesto al barril del crudo tendría un impacto mucho mayor en el bolsillo de los contribuyentes que lo que ha alegado el primer ejecutivo, quien en su mensaje al País la noche del domingo, afirmó que tendría un efecto de $1.17 semanales en una familia promedio. De acuerdo con los estimados de la representante del PNP, el impacto general sería de $704 millones anuales, si se toma en cuenta el alza que se aprobó de ese impuesto a mediados del 2013.

González emplazó al gobernador a revelar cuánto recaudó el primer aumento al arbitrio, y detallar qué se hizo con esos recursos. Al mismo tiempo, recabó que se presenten los informes financieros de la ACT para conocer con certeza su situación presupuestaria.

La representante novoprogresista reclamó, además, que se presenten públicamente las recomendaciones de la firma consultora KPMG, contratada por el Gobierno para delinear la propuesta de reforma contributiva.