El carácter transicional del Impuesto de Ventas y Uso (IVU) de 11.5% que ha propuesto el gobernador Alejandro García Padilla para luego establecer un Impuesto al Valor Añadido (IVA) no debe ser impedimento para que el proyecto enviado por el Ejecutivo anoche a la Legislatura sea aprobado en la Cámara de Representantes, según confió hoy, martes, el presidente de este cuerpo, Jaime Perelló.

Aún con la disidencia expresa ya por cuatro de los representantes, el líder cameral apostó por el consenso para adelantar la medida que, junto con un recorte de $600 millones en gastos, se propone cuadrar el presupuesto para el próximo año fiscal.

“Estamos en un momento dado en el que el país lo que está pidiendo de todos nosotros es desprendimiento”, acotó Perelló antes de enfatizar en que la propuesta que ahora está en discusión no es la misma que él defendió por meses para la implementación de un IVA con ciertos alivios contributivos, pero que es una medida para asegurar recaudos al fisco.

“Todos tenemos que movernos, no a lo que nosotros queremos, sino a lo que es posible lograr en este momento para lograr un presupuesto que no tenga una cantidad de cortes tan grande que afecte los servicios a la población que nosotros estamos llamados a defender”, sostuvo.

Perelló no descartó que exista un espacio para estudiar alternativas, como lo pueden ser el cobro del arbitrio general en los muelles, pero “la realidad es que eso no está maduro para tú ponerlo como una opción de recaudos en el momento”. 

Esta es una de las propuestas con las que han insistido cuatro de los seis legisladores que votaron en contra del proyecto de transformación contributiva que implementaría el IVA, Luisa “Piti” Gándara, Luis Raúl Torres, Manuel Natal y Luis Vega Ramos. Estos también reiteraron en una carta que enviaron anoche a La Fortaleza que se debe renegociar la deuda y aumentar los impuestos a las megatiendas y empresas foráneas. 

En su misiva, descartan haber coincidido con que el IVU de 11.5% fuera a ser eventualmente un IVA, elemento de la propuesta del gobernador que, según Perelló, sí se acordó el pasado jueves en una reunión entre el primer ejecutivo y los miembros de la Conferencia Legislativa del Partido Popular Democrático (PPD).

“El acuerdo es sencillo. Aumentar el impuesto actual a un 11.5%, un 4% en el área entre negocios sin transparentar, para movernos para que esa área entre negocios sí transparente con el mismo 11.5%”, insistió el presidente cameral. “Si la preocupación es que ese 11.5% vaya a subir, eso no va a ocurrir. Ese fue el acuerdo al que todos nosotros llegamos”.

Perelló dijo, por otra parte, que, en el período de transición, en el que se establecerá un impuesto de 4% a los servicios que actualmente están exentos de tributación, el impacto para los pequeños y medianos negocios será menor al que recibirán los más grandes porque estos últimos contratan más.

“El impuesto de transición es un asunto de la venta y eso obviamente tiene un impacto en todo lo que es venta al detal, los grandes y los pequeños (comercios). Cuando esto trascienda a un proyecto donde va a haber un impuesto mayor entre negocios y lo puedan transparentar, el proyecto tiene unas medidas para proteger a los pequeños y los medianos comerciantes por un tope de venta”, apuntó. 

Anticipó que la medida debe aprobarse próximamente para pasar a una tarea que consideró mucho más compleja, la de establecer un presupuesto con un recorte de $600 millones.