El Senado confirmó hoy, jueves, los nombramientos de Idalia Colón y Alberto Bacó como secretarios de los departamentos de la Familia y del Departamento de Desarrollo Económico, respectivamente.

El primer nombramiento que consideró el Senado en su sesión ordinaria fue el de Colón, quien fue confirmada con 14 votos a favor de los legisladores de la delegación popular y la senadora independentista María de Lourdes Santiago, pero con la oposición de cinco senadores novoprogresistas.

La designación de Bacó, mientras, fue aprobada con el voto a favor de las delegaciones de los partidos Popular Democrático y Nuevo Progresista.

Sin embargo, Santiago, como portavoz del Partido Independentista Puertorriqueño, se expresó en contra del nombramiento de Bacó por entender que carece de la capacidad y franqueza para lograr una económía dinámica y próspera para Puerto Rico, pero no estuvo presente al momento de la votación.

Loas para Bacó

 El presidente del Senado, Eduardo Bhatia, elogió a Bacó al destacar que ya ha realizado múltiples reuniones "con personas que quieren invertir en el país", y anticipó que gracias a sus gestiones ya ha logrado compromiso para generar 14,000 empleos.

Bhatia opinó que Bacó garantiza que los negocios hechos por Puerto Rico y para Puerto Rico tendrán "los más altos valores y experiencias profesionales que el comercio internacional exige".

Por su parte, el presidente de la Comisión de Gobierno, Ángel Rosa, al leer parte del informe recomendando la confirmación de Bacó, destacó que el funcionario tiene vasta experiencia en reestructuración y reenfoque de negocios, finanzas corporativas y acceso a capital y financiamiento.

Bacó, agregó Rosa, "está sumamente familiarizado con las agencias gubernamentales que trabajan con el desarrollo económico en la Isla. Por lo tanto, podrá implementar y ejecutar cambios en la agencia con relativa facilidad".

Prioridad a los “más vulnerables”

Previo a la votación sobre el nombramiento de Colón, la senadora Rossana López presentó un informe en el que se destacó la experiencia profesional de la trabajadora social para desempeñarse adecuadamente como titular del Departamento de la Familia.

López aludió al compromiso social de Colón y citó su experiencia previa en el Gobierno, donde ha laborado como jefa de la Administración de Familias y Niños (Adfan) de 2001 a 2002, así como asesora de la exgobernadora Sila Calderón, de 2002 a 2005.

La senadora hizo referencia también al compromiso de Colón de atender con celeridad unas 42,000 querellas de maltrato de menores "desatendidas" en el Departamento de la Familia durante la pasada administración.

Colón consignó en el Senado que ha comenzado a atender con urgencia las querellas sobre "los menores más vulnerables". La nueva titular de la Familia dijo que de 5,175 querellas de ese renglón, que se refieren a niños de 0 a 7 años, en las primeras semanas en el cargo se habían investigado 1,449 querellas.

Explicó que creó un plan de trabajo para resolver la acumulación sin precedente de esas querellas, y denunció el cierre de expedientes sobre estos casos "de forma irregular" en una agencia afectada adversamente por la limitación de recursos humanos por efecto de la Ley 7, así como por privatización de servicios en la Administración de Desarrollo Socioeconómico de la Familia (Adsef).

La senadora Santiago se expresó a favor del nombramiento al elogiar "la larga trayectoria de servicio público" de Colón y por asumir posiciones admirables ante "temas espinosos sobre la igualdad de los ciudadanos ante la ley".

La mayoría parlamentaria también colmó de elogios a Colón, pero la senadora novoprogresista Itzamar Peña se pronunció en contra de la confirmación por entender que durante su desempeño en Adsef se incurrió en "mal uso de fondos públicos".

Peña dijo que en el periodo de 2006-2007 en la citada agencia, una partida de $3.2 millones de fondos federales del Programa de Ayuda Temporera a Personas Necesitadas fueron "transferidos ilegalmente" al Programa Título 20, para ayuda niños y jóvenes.

Según Peña, esa acción tomada durante la dirección de Colón Rolón en Adsef representó "recortes de más de $5 millones", lo que "afectó servicios a niños, niñas, jóvenes y envejecientes debido al mal uso de fondos públicos".

Los senadores populares recriminaron a Peña por sus declaraciones en contra de Colón, y condenaron que pretendieran "mancillar su reputación", después de un cuatrienio en el que, según destacó la legisladora Mari Tere González, se incurrió en "gastos excesivos en publicidad para mercadear el Departamento de la Familia" mientras se desatendieron las querellas por maltrato de menores y los servicios.