El secretario asociado de Educación Especial, Eliezer Ramos, reveló este viernes que 50 de las 172 escuelas que se evalúan para retomar las clases presenciales ya se han catalogados como aptas para recibir a los estudiantes.

Sin embargo, aceptó que desconoce cuáles son esas escuelas que comenzarán a dar clases presenciales para poder comunicarlo a los 103,000 alumnos de este Programa de Educación Especial.

“Tengo que aceptar que todavía no la tengo” la lista de escuelas que abrirían, expresó durante la vista pública que realiza la Comisión Especial del Senado para la Monitoria Legislativa del Programa de Educación Especial del Departamento de Educación.

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Reveló que lo proyectado es que las escuelas abran el 1 de marzo para recibir a maestros y el personal docente, mientras que el 3 de marzo lleguen los estudiantes en “las escuelas identificadas como aptas”.

Visiblemente molesta con la contestación, la presidenta de la Comisión Especial, la independentista María de Lourdes Santiago, le increpó si no había requerido esa información de la secretaria de Educación, Elba Aponte.

“Le he hecho muchísimas preguntas no solamente a ella, sino también al Departamento de Salud”, le respondió, al reiterar que no tiene disponible la información requerida por la Comisión.

Explicó que se evalúan unas 172 escuelas que pudieran abrir sus puestas en poco más de una semana. En estas hay 2,465 estudiantes de educación especial. No supo precisar cuánto de estos alumnos están en las 50 escuelas ya certificadas para comenzar en marzo.

“Si sé que hay escuelas que no han pasado el crisol de la evaluación”, señaló en otra instancia, la exponer que próximamente la secretaria de Educación y el gobernador Pedro Pierluisi informarían en específico cuáles escuelas abrirán.

En un aparte con la prensa, el secretario asociado de Educación Especial reconoció la inconformidad que existe por no dar a conocer ya la lista de las escuelas que abrirían.

“Le corresponde a ella, (a Aponte), poder dar explicaciones y poder dar detalles al país, que yo creo que todos estamos esperando”, afirmó en una instancia.

Luego, agregó que le llevará a la secretaria la preocupación que existe con esta reapertura de escuelas.

Yo creo que hay una necesidad urgente de que conozcamos, aunque sea parcialmente, esa lista de escuelas. Comparto la preocupación y comparto que, mientras más informados tengamos a la ciudadanía, mejor respuesta vamos a tener”, sentenció.

Por su parte, la senadora Santiago tronó contra Educación por no tener disponible la información más básica sobre la reapertura de escuelas a poco más de una semana de que se supone que reciban a los estudiantes.

“A mí me parece completamente injusticable el misterio, la nébula. Si hay 50 escuelas certificadas, ¿cómo es que el país no puede saberlo? ¿Cómo es que esas comunidades escolares no se pueden preparar para recibir a los niños? Me parece que es algo que no tiene explicación alguna. Sobre todo, según reveló el secretario asociado, no hay una medida estandar para definir el nivel de preparación de las escuelas. O sea, va a depender del arbitrio de las regiones. Eso es insostenible y en términos salubrista es insostenible también”, manifestó a Primera Hora.

Parte de la reacción de Santiago se debe a que Ramos informó, durante la vista, que no hay un documento que estipule qué hace a una escuela apta para abrir ahora en marzo. Sí dijo que hay unos protocolos y que Educacion “se está asegurando” que las escuelas lo cumplan antes de determinar si abrirían.

Cuando el senador Rafael Bernabe le increpó por qué no determinaron abrir en agosto, Ramos reiteró el mensaje que se ha dado de la necesidad de atender la salud emocional de los niños con este educación presencial.

“Yo creo que, si el día ante de abrir las escuelas los indicadores establecen que no se debe abrir, yo sería una voz fuerte para que no se abran”, sostuvo.

Por otro lado, el titular aceptó que el Programa de Educación Especial no generaría ahorros por las terapias que no se han ofrecido a causa de la pandemia.

“No proyecta ahorros por conceptos de terapias no ofrecidas, ya que los servicios de terapias que se pueden ofrecer durante el semestre escolar se convierten en su mayoría en servicios compensatorios que el Departamento de Educación debe proveer en el verano o en el próximo año escolar, si el periodo del verano no es suficiente para compensarlos”, indicó el funcionario.

Reacciona el Comité Timón

Ante la ausencia de información presentada por Educación, Carmen Warren, portavoz del Comité Timón de Familiares de Personas con Impedimento, señaló que la población de Educación Especial que podría beneficiarse de esta reapertura es mínima. Pero, más importante aún, criticó que a estas alturas Educación no pueda proveer a los padres información importante sobre el proceso de reiniciar las clases presenciales.

“El Plan de Inicio de Clases en Medio de la Pandemia del Departamento de Educación, que no considera las limitaciones, necesidades y opiniones de nuestra comunidad”, señaló.

También expresó que “desconocemos la forma en la que el Departamento de Educación recibirá y despedirá a los estudiantes. Es de suma importancia que cada familia, participe de la planificación del regreso a clases. El Departamento de Educación deberá considerar no sólo la opinión de la comunidad escolar, sino además las estructuras, localización y acceso a las escuelas para evitar las aglomeraciones”.

Warren dudó que los padres vayan a llevar a sus niños a las escuelas, cuando desconocen información esencial sobre el proceso para reiniciar las clases presenciales, como el relacionado al transporte y servicio a la población.

“Los altos niveles de posibilidad en el país, no están las condiciones en las escuelas después de los sismos, los ajustes que se tenían que hacer para equipar y tener listas las escuelas, eso no se ha hecho, no se ha logrado para esa fecha (3 de marzo). No entendemos que se pueda dar inicio a los servicios educativos para ese tiempo”, puntualizó.

Cabe destacar que Ramos dijo a la prensa que el servicio de transportación estaría disponible en las escuelas que se determine que abrirán, así como estará todo el personal disponible de Educación Especial, incluyendo a los asistente de servicios (T1), en donde hay 908 plazas vacantes.