Estaban todos atentos y en silencio. Si alguien hablaba o hacía ruido lo mandaban a callar.

Así transcurrieron unos 10 largos minutos en lo que el gobernador Ricardo Rosselló anunciaba a través de un mensaje pregrabado que renunciaba a su cargo.

La multitud que se dio cita, como en los pasados 12 días, cerca de La Fortaleza esperaba por el pronunciamiento el Primer Ejecutivo hasta que a eso de las 11:40 de la noche, luego de una maratónica espera, se produjo el mensaje.

A través de sus teléfonos celulares vieron y escucharon a Rosselló decir que sería el gobernador de Puerto Rico hasta el próximo viernes, 2 de agosto a las 5:00 p.m.

Los congregados en el Viejo San Juan estallaron en gritos y se abrazaron; brincaron y celebraron. Festejaban coreando “¡Hicimos historia!” y “Vamos por los otros, vamos por la Junta” como sus nuevas consignas al saberse vencedores.