Para el cardiólogo Iván González Cancel, la salida esta noche de Emilio Díaz Colón de la superintendencia de la Policía tiene el objetivo de desviar la atención del aparente escándalo en la primaria del Partido Nuevo Progresista denunciada por el alcalde de Guaynabo, Héctor O’Neill.

El gobernador Luis Fortuño aceptó la renuncia de Díaz Colón como jefe del cuerpo policiaco y designó de forma interina al coronel José Luis Rivera.

Más temprano en el día, el alcalde de Guaynabo retó al gobernador y presidente del PNP a que aleje al ex representante Edwin Mundo del escrutinio y recuento de las primarias en la CEE.

"La salida del superintendente de la Policía, ingeniero Emilio Díaz Colón es una renuncia que este servidor había solicitado hace unos meses como resultado de no haber un verdadero plan anticrimen en funciones y la poca experiencia que nunca tuvo el renunciante jefe de la uniformada, ingeniero de profesión.  Sin embargo, tengo que decir: que esta renuncia no se da en el vacío y tiene como estrategia el desviar la atención, usando a Díaz Colón como chivo espiatorio ante el desastre de la administración del gobernador Luis Guillermo Fortuño Burset.  Esta estrategia del despido del Superintendente de la Policía, tiene el único propósito de cambiar el enfoque de la discusión pública de las últimas horas, a raíz del escándalo de las primarias denunciado por el alcalde Héctor O'Neill, que claramente evidencia la falta de liderato del gobernador, Luis Guillermo Fortuño Burset.  Nos parece que aquí se plantea una renuncia equivocada, y el que tiene que renunciar es el propio Gobernador Fortuño Burset, por haberle fallado al pueblo", señaló González Cancel.