Tras un año sacudido por los sismos del suroeste y abatido por los efectos de la pandemia del coronavirus, la gobernadora Wanda Vázquez invitó en esta Navidad a los boricuas a no perder la magia y ese encanto que hace a Puerto Rico distinguirse de los demás pueblos del mundo.

“Nuestro pueblo no debe nunca perder su magia, su encanto, lo que nos hace diferente al resto del mundo, nuestro amor propio y ese ‘ay, bendito’ que florece de nuestra alma por nobleza, por querer siempre ayudar al prójimo”, afirmó en un vídeo publicado en las redes sociales.

En su mensaje navideño y ya por despedirse del gobierno, Vázquez repasó el año y medio que lleva dirigiendo el país.

“Hace más de un año asumí la encomienda de servirles a todos ustedes, mi gente, mi Isla. La incertidumbre que reinaba era la cruda realidad que veíamos en aquel momento. Pero nuestra primera meta fue unir a todo un pueblo y lo logramos. Luego de tanta turbulencia, le dimos paz y estabilidad que tanto merecía nuestro pueblo. Desde entonces, nos ha tocado duro. Los golpes han sido fuerte, pero hemos sabido levantarnos porque somos un pueblo llenos de fe y esperanza”, dijo.

De paso, expuso que la vida del boricua ha cambia en esta Navidad a causa de la pandemia. Pero, pidió celebrar “el significado de la vida”.

“¡Feliz Navidad! Que las ilusiones guardadas puedan finalmente verse realizadas, que los sueños que tuvimos que poner en pausa los podamos lograr prontamente. Al final, la vida es una sola. Vívela, disfrútela, ría cante, baile, logre ser feliz, viva con humildad en el corazón”, recomendó.

La gobernadora también envió un abrazo solidario a las 1,432 familias que han perdido a sus seres queridos como secuela del coronavirus.

“Pidamos que el niño Jesús toque los corazones de cada hogar de esta Isla bendecida y que tanto queremos… Que Dios los bendiga hoy y siempre”, manifestó la primera ejecutiva.